Abotonado por el perro de mi primo - Relatos Eróticos

Abotonado por el perro de mi primo

Soy un hombre maduro llegando a los 60 años. Si bien estoy casado con una mujer, he tenido la suerte de estar con muchas otras mujeres gozando a lo loco.

En una ocasión estando en la casa de una mujer venezolana, mientras estabamos en pleno acto, en el piso de su living, el perro de ella comenzó a lamerme el culo, no dije nada y lo dejé hacer. La verdad en ese momento solo pensaba en gozar con mi amiga y el perro con su lengua me daba más placer. Después mi amiga me contó que a ella le lamió o sea le metió lengua alos dos.

La sensación fue exquisita y no sé porqué razón le propuse a mi amiga que me dejara probar otra vez la lamida de su perro en mi ano. Lo hicimos mientras yo no paraba de chupar su clítoris el perro no paraba de meterme la lengua cadavez más adentro, esto hizo que tuviese una gran acabada. Pero bueno todo quedó ahí.

Yo tuve que regresara mi país y no volví a tener esa experiencia. Pasaron un par de años.

Un año mi primo se iba a tomar unas vacaciones y no podía llevar a su perro, un galgo alto, fibroso y musculoso. Me pidió si podía pasar por su casa un par de horas al día para estar con su perro. Acepté porque no tenía ningún problema, además el tenía una piscina que podría usar esos díass.

Así las cosas, el primer día que fui atendí todas las necesidades del perro, y después me dispuse a disfrutar de la piscina. Como no había nadie y los paredones son altos decidí hacerlo sin ropa. cuando salí me puse a tomar sol de espalda y al rato el ...

... perro vino y comenzó a lamer mis nalgas. De golpe me vinieron todos los recuerdos, abrí mis piernas y levanté mis caderas y lo dejé hacer. Ufff que calentura me dío. Y como jugaba con mi agujerito. Tan rico que comenzé a pajearme logrando una gran acabada.

Me dejó muy excitado. hasta el momento nunca había tenido intenciones de dar mi culo. pero el perro despertó algo en mi.

Al otro día fui pensando en hacerlo una vez más. Una vez terminada la rutina de cuidados del perro, me desnudé y puse mantequilla en lo profundo de mi ano. Otravez me acosté y dejé que él hiciera todo, fue muchísima más la exitación metia su lengua más adentro como limpiando la profundidad de mi ano lleno de mantequilla. Otrave una gran acabada. Pero al parecer él no quedo satisfecho y quería algo más, intentó montarme y como no lo dejé me follaba la pierna, ahí vi su gran pene por primera vez. lo aparté y me metí en la piscina. Mientras estaba ahí me daban vuelta mil ideas, porqué no entregarle mi culo? si nadie lo sabríay la verdad me estaba gustando que juegue con él. Me dejé llevar por la calentura, salí de la piscina me volví a intar el culo con mantequilla y lo dejé hacer. Como siempre primero me lavó el culo con su lengua, después buscó mi pene que tenía precumen y lo lamió, con cuidado lo dejé hacer. Al rató me rodeó yo me puse en cuatro y así nomás me montó. Le costó ensartar su pene en mi culo cuando lo hizo sentí un gran placer, me gustaba como me iba dando. Lo que no recordé de la calentura ...