Como empecé una relación con mi prima de 5 años. Parte #4 - Relatos Eróticos

Como empecé una relación con mi prima de 5 años. Parte #4

A la mañana siguiente, mi prima me saludo normal como de costumbre. Ese beso fue lo que desencadenó el resto de nuestra pervertida historia.

Eran las 8 de la mañana, era sábado y toda la familia estaba abajo preparando el desayuno. Yo estaba con mi prima ayudándole a recoger un cuarto donde había muchos juguetes.

Al no haber cama, ella y yo nos recostamos en el suelo al terminar de recoger. Yo ya tenía el permiso implícito de tocarla (cada que yo lo hacía ella no se quejaba y se ponía de modo) así que le empecé a acariciar su pelo, sus mejillas y su espalda… ella cerraba sus ojos y paraba su boquita (así como cuando la besé por primera vez) era así como ella me daba el permiso para yo hacer lo que quisiera.

A mi gustaba primero darle besos en su cuello, mejillas, en sus manos y hombros… por último me acercaba a sus labios para besarla. Ella no se movía, yo era quien la besaba, metía mi lengua en su boca húmeda tratando de alcanzar la suya, el sabor de su saliva era único, ella siempre olía tan rico que hasta eso me exitaba.

Como yo era más grande siempre la cargaba y la ponía sobre mi, ella sabía lo que tenía que hacer… empezaba a frotar su vagina con mi pene.

Mientras nos besábamos como unos locos, ella tomaba mi mano y se la llevaba a su vagina para que yo la tocara, yo le preguntaba si le gustaba que la tocara y ella como siempre me respondía un “mhaja”.

Pero como yo era inexperto y era muy pequeña su vagina como para que la masturbara, yo acariciaba su ...

... espalda y poco a poco empecé a bajarle el pantalón que tenía, deje de bésala para admirar sus lindas, apretadas y pálidas nalgas, me abalancé a tocar ese culito que me tenía loco desde que la vi por primera vez en vikiny… eran suaves, un poco duras porque al frotarse en mi tenía que hacer fuerza, así que yo la tome y empecé a tomar el ritmo.

Nos detuvimos porque me hizo la declaración más estúpida eh inocentemente posible… me dijo: “Mi mamá me dice que no deben de tocarme mis pompis” Yo le dije a modo de burla: “A si, tiene razón, no deben de tocarte nadie”

Yo continué besándola y ahora quería meter mi dedo en su ano, cada que abría sus nalguitas emanaba un calor delicioso de ahí. Pero fui interrumpido por unos pasos en la escalera, rápido se levantó se limpió la saliva y se acomodó.

Mi tía tenía que salir de emergencia y me dijo que si yo podía ir a recoger a la escuela a mi prima.

¿No se si les ha pasado que con uniforme se hace más difícil de reconocer a alguien porque todos están igual?

Pues bien, este no fue el caso. Ella sobresalía del resto de niñas.

Su peinado impecable, sus medias blancas bien puestas y limpias, aunque su rostro demostraba cansancio era evidente su felicidad al verme.

Le ayude con la mochila. Nos fuimos tomados de la mano hasta llegar a casa.

Creo que con ella desarrolle una habilidad…era capaz de oler su deseo sexual, pues ese preciso olor lo noté cuando llegamos a casa.

Me dijo que si le ayudaba a hacer la tarea, me senté ...