Clases prácticas de sexo, parte 1
Fecha: 20/08/2024,
Categorías:
Incesto
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Daniel estaba en su cuarto viendo pornografía y masturbándose. Sólo llevaba puesta una playera. De pronto sintió unos pasos que se acercaban a su habitación. Sabía que era su papá y que iba a entrar en el cuarto sin llamar a la puerta, así que cerró la ventana donde estaba viendo el video. Sin embargo, estaba muy caliente. En lugar de tratar de ocultar su erección, simplemente actuó como si estuviera cambiándose de ropa. Cuando su papá abrió la puerta, fingió que se quitaba la playera. Sin embargo, su verga estaba completamente dura y a la vista de su papá.
-¿Qué haces aquí? -preguntó con cierta curiosidad pero también con un toque de vergüenza, porque la tenía muy dura.
-Disculpa, no quise interrumpirte.
-No, tranqui, me estaba preparando para salir.
-No hay problema, yo también estaba pensado en ir a comprar. ¿Tú necesitas algo?
Pudo ver que su papá estaba intentando, pero no pudo ignorar lo evidente. Su mirada se fijó en su polla.
-No, gracias, está bien.
Pero su papá era demasiado curioso para dejar la habitación, así que tuvo que preguntar una vez más:
-¿Hay algo más que quieras decirme?
-Sí, papá. ¿Puedo pedirte un favor?
-Claro. ¿Qué deseas?
-Me gustaría que le dieras un vistazo a mi pene.
El papá de Daniel ya estaba mirando la dura verga de Daniel. Parecía más grande de lo habitual, probablemente porque Daniel no llevaba ropa interior. Su papá también estaba nervioso, pero le daba la impresión de que su hijo le quería preguntar ...
... algo serio, así que decidió no adelantar juicios.
-Está bien. Si es lo que deseas, lo doy un vistazo. Hay algo que te
preocupa
? Últimamente tu mamá se ha quejado de que no te dejas ver mucho. Dice que te metes en tu cuarto apenas llegas del trabajo. Por eso...
Pero Daniel lo cortó:
-Hablemos en privado. Cierra la puerta.
El papá cerró la puerta tras de sí, quedando sólo ellos dos en la habitación.
-Ahora dime qué te preocupa.
-Quiero saber tu opinión sobre mi pene.
-¿Por qué?
-Porque me preocupa su tamaño. Creo que es demasiado pequeño.
-Es broma, ¿no?
-No. Creo que tengo un problema con su tamaño.
-Lo dudo.
-¿Qué tan grande crees que es?
-No lo sé. Quizás alrededor de 14 centímetros.
-¿De verdad crees eso? Yo lo he medido y son 12.
–Déjame mostrarte que estás equivocado. Acércate, por favor.
Daniel no dijo nada, hizo lo que le pidieron. Se dio vuelta y dejó que su papá le mirara la verga.
-No te preocupes, no voy a hacer nada. Sólo quiero verte la verga.
Miró el pene de Daniel durante unos segundos.
-Es normal, no creo que sea un problema para ti satisfacer a una mujer.
-Quizás... No lo sé, aún no tuve ninguna experiencia sexual. El tamaño me preocupa mucho.
-Es de lo más normal, confía en mí. ¿Tienes algo más que quieras preguntarme?
-¡Ajá! ¿Me puedes hacer un favor, papá?
-Lo que sea, muchacho. ¿Qué es lo que necesitas?
-¿Me dejas ver tu verga?
-Supongo que es justo, échale un ojo.
El papá de ...