Los obreros frente a mi casa iii - Relatos Eróticos

Los obreros frente a mi casa iii

Había sido un noche muy dura en el hospital, varios pacientes habían estado muy nerviosos y molestos por sus heridas de operaciones de ese mismo día, ni un minuto de descanso para paliar y tranquilizar en lo posible a aquellos hombres. Estaba agotado, pero siempre satisfecho de hacer siempre lo que estaba en mis manos por la gente que necesitaba de mis cuidados.

Cuando llegue a casa y pase por la obra, como siempre lo típico, miradas indiscretas, algún piropo grosero, algun buenos días.....nada de aquello perturbaba mi mente, era libre de mis actos, de mi vida y no tenía porqué tapar mi condición, ni mis apetencias sexuales y si me gustaba alguien se lo decia y punto. Me crucé con Hakim le levanté la mano y le guiñe un ojo, el se hizo el desentendido, claro el chaval no quería que todos supieran que se follo a un tío, más adelante me crucé con Tobías el encargado, este si que me saludo....

- hola Pedro....de currar me imagino....buen día.

- si, siiiiii....buenos días Sr. Encargado.

- espero no molestarte mucho, lo siento.

- bueno que vamos a hacerle es vuestra faena, ahhhh y gracias por lo de los camiones.

- bueno......que menos podía hacer después del regalo que me hiciste.jejeje.

- veo que te gusto no???? Pues cuando tengas tiempo sabes dónde vivo, puedes subir te invito a un café.

- ummmm....buena proposición la verdad.....se agradece guapete.

- venga capitán, nos vemos ok?

- xaoooo....cabroncete.

No había hecho más que meterme en la ...

... ducha, cuando un golpe y unos gritos desgarradores provenientes de la obra me pusieron en alerta. Me asome corriendo al balcón y vi un corrillo de gente alrededor de un tipo tumbado en el suelo, parecía sangrar por algún lado, los compañeros estaban muy nerviosos, así que me puse unos pantaloncillos, las chanclas, agarre material de primeros auxilios y salí corriendo.

Cuando llegue allí me encontré con varios compañeros a su lado, el encargado llamando al 112 , me abrí paso e hice que se separarán de él, tenía un corte en una mano, sangraba mucho, enseguida hice un torniquete con un cinturón de uno de sus compañeros y después tapone con vendas la herida hasta que dejó de salir a borbotones la sangre. Mantube la herida tapada.

- por favor señores dejen correr el aire, alguien que traiga algo para que esté hombre pueda apoyar la cabeza ok?

- hacer caso a este hombre, Ramiro trae el cojín de mi caseta.

El encargado se quedó a mi lado mientras venía la ambulancia, los dos tranquilizabamos al herido, parecía ser un corte limpio, pero profundo, bastante escandaloso por la sangre, se había cortado con una radial. El tal Ramiro trajo el cojín y lo pusimos bajo su cabeza, se arrodilló junto a nosotros, al mirarlo me quedé impresionado, parecía venezolano, iba sin camiseta, sudoroso, era guapo, marcado o bien por su trabajo o bien de gimnasio.....

- gracias tio, es mi hermano mayor.

- ahhhh, no hay de que de verdad, y tranquilo todo estará bien.

- buaaa.....estoy ...