Maldita y amada Tarea - Relatos Eróticos

Maldita y amada Tarea

... mientras me acomodaba en mi lugar viendo que ni la laptop había encendido:

-Enciéndela pendejo, dale, quiero ver.

-Esta pendejada se apagó de repente, espera.

Note que, por el olor en el momento, como ya habíamos visto porno juntos antes un tanto sudados conozco ese olor característico de su miembro, a lo que trague saliva viendo de reojo que ya estaba marcado sobre el pantalón de pijama. La pc subió y en cuanto todos los sistemas estaban arriba abrió la carpeta donde estaba el video y saco otra vez ese mástil duro apuntando al techo a lo que yo me baje mi ropa interior y la tire a una esquina de la cama mientras empezaba el video de una chica que iba en un auto con un muchacho el cual mientras conducía le hablaba de el sexo oral a la chica y ella le desabrochaba el pantalón para luego dejar salir de golpe su pene dejándolo pegado en su cara y yo solo me imaginaba en su lugar mientras quería el miembro de José en la mía para llevarlo hasta el fondo de mi garganta. La chica le daba una mamada a la pana que lo dejaba tan lubricado y lleno de saliva que había hilos que cuando lo sacaba conectaban con su boca y el miembro. Era tan morboso y erótico que me estaba volviendo loca llevándome casi al clímax de imaginarme haciéndole eso a mi compañero. Note como estaba a punto de terminar:

-O-oye José....

-¿Si? -decía sin detenerse- ¿Qué sucede?

-La tienes muy seca -seguía frotándome lento pero fuerte mientras lo miraba como palpitaba.

-Si pero ya casi termino, ...

... que se te ocurre?

-¿Deja te ayudo un poco, va?

-Segura de que quieres hacer eso? -Ya no aguantaba tanto tiempo aguantando asi que mientras el hablaba me arrodillaba frente a el respirando fuerte en su pene.

-Muy segura, además, creo que podemos hacerte sentir algo glorioso -le decía mientras con mis enormes niñas lo cubría intentando masturbarlo- Ves? Esta muy seco, hace falta lubricarlo -ya que había llegado tan lejos quería probarlo, así que me lo entre hasta que llego a la parte de atrás de mi manzana de Adán, que largo y sentir como palpitaba dentro de mi boca solo me ponía mas así que lo saque despacio dejando lo lleno de saliva y brillando con esos hilos de saliva en el y mi boca que ahora, por haberlo dejado tantos segundos eran muchos.

Luego de eso su mirada me veía directo a los ojos y ajetreado respiraba notándose que solo quería dejar salir todo ya y tomando en cuenta que es lo miembro que yo quería desde hace mucho pero ahora en mi boca, ya que estaba bien lubricado mis niñas se movían apretando de arriba abajo mientras le lamia y chupaba la punta. Esa cara de tortura no tenía precio, solo que, al parecer, después de unos segundos de tortura sujeto mi cabeza de manera tal que posicionándolo bien me comenzó a dar una cogida en la boca como si de una bestia se tratara, solo que en este momento me lo dejo todo adentro y ya otra vez con el palpitando más allá ahora de mi manzana de Adán comenzó a eyacular una cantidad de semen que parecía que la tenía ...