Familia Corrupción y Sexo F54 - Relatos Eróticos

Familia Corrupción y Sexo F54

... este, quien guiado por su pasión la penetraría sin miramientos, imponiendo el ritmo para empezar con un sexo esperado, si el joven notaria que algo era distinto, pues lo sentía entre los pliegues de la hermosa niña quien no dejaba de gemir con un tono distinto, uno que encendía sus ánimos, sintiéndose tan acalorado, viendo como Dany iba moviéndose de forma casi irreal sus cadera para hacer que Sora se escurriera en el acto, agitando su cuerpo en un tono erótico único, resultaba una locura creía que iba a explotar la sexualidad en esos movimientos viciosos, logrando que tanto la niña como él se sintieran perdidos en la lujuria antes de su corrida.

Ah, Dany me encanta, mm, te amo, te amo mucho – dijo Sora en medio de su corrida.

Sigo yo – decía entusiasmada Jade casi derribando a Dany cuando vio su oportunidad.

Así que el magnate vería cansado como la chica se abalanzaba para ser penetrada de manera instintiva, buscando aquel contacto rudo, que abría sus pliegues internos de una manera que tanto le gustaba, suspirando al verse invadida, quedando sobre la mesa de centro, siendo empalada, mientras su miembro empezaba a moverse de manera contagiosa, pues la misma chica seguía el ritmo para empezar a decir varias cosas de gusto tan sensual que incrementaban el morbo, pues lo decía con una inocencia tan morbosa que lo hacía sentir deseos de continuar, aunque se hallaba agotado, más no quería quedar atrás, y también siguió con el juego, aprovechando ese culito redondo, y ...

... debía admitirlo, todas esas hembras eran preciosas, de cuerpos esculturales, formas tan femeninas, rostros muy agraciados, eran una delicia total, dejaban ver gestos encantadores, llenos de lujuria, pero también una especie de amor que no parecía común en aquel mórbido mundo del club, haciéndole desear algo similar todas llenas de un encanto sexual que resaltaba mientras eran sometidas por el placer sexual romántico, un verdadero deleite difícil de resistir, iba sujetándose, sintiendo aquel ritmo del macho de todas ellas, un maldito semental si podía darles su gusto a cada una, perdiéndose igual en el erotismo necesario para satisfacerlas, se hallaban acostumbradas a ese gusto, moviéndose en una completa armonía, entregándose totalmente, cuando se terminó corriendo, antes que ellos, quienes duraron más.

No quería sentirse derrotado, así que atrajo a Jane para sobar su verga con sus carnosas nalgas, eran demasiado ricas, las miraba con un deseo que le parecía irresistible, las fue sobando con delicadeza, como si se trataran de una obra de arte, así se fue recuperando, y cuando pudo empezó a penetrarla por su culo, sintiendo una calidez que no esperó, un placer mejor al soñado, aquellas masas de carne eran tan blancas y suaves, apretaban de manera exquisita su verga, además la niña era también hermosa, digna de todos los elogios, la sujetaba con firmeza, como si se la fueran a quitar, mientras ella veía a su prima, casi hermana follar, pero no tardaron tanto, en ese momento una ...