El Cuñado 2 parte 3 - Relatos Eróticos

El Cuñado 2 parte 3

EL CUÑADO 2 Parte 3

Esa mañana, todo transcurrió con tranquilidad, Oscar se había marchado temprano.

Sofía le rendía culto a su dios en el gimnasio, el ejercicio diario, su cuerpazo era el templo al que había que mantener en perfectas condiciones para ser usado como instrumento de placer y adoración.

Se dice que no hay fanático mayor que los conversos, aquellos que se convierten a una religión o credo después de no haber creído.

Hasta hacía tres años Sofía no sabía lo que era un gimnasio y sin embargo su cuerpo y su mente habían reaccionado a esos estímulos como si hubiesen estado allí, dentro de ella desde siempre.

Yo flotaba en la piscina, las imágenes de la noche anterior enturbiaban mi mente, en contraposición a lo diáfano del día.

Qué punto tremendo de sumisión había alcanzado ella con Oscar ¿También eso estaba guardado dentro de su cuerpo esperando salir? Que poco había necesitado él para encenderla. Claro que cada nuevo peldaño que se bajaba tenía que ver con el paso previo, primero había sido el video ese de su falso yo follando con Borja, luego el meter en su cabeza el deseo de follar con Borja, luego la trampa que nos tendiera Oscar.

Había sido un razonamiento muy lógico de su parte, si ella estaba dispuesta a follar con un cuñado bien podía hacerlo con el otro.

Sofía había terminado su rutina de ejercicios y llegaba hasta la piscina, llevaba un bikini negro que era bestial, las tiras de tela recortaban su cuerpo increíble y ...

... voluptuoso.

Otra vez esa sensación enfermiza de que me parecía que cada vez que Oscar se la follaba se ponía más buena.

Felinamente se introdujo en el agua.

_ ¿Qué haremos?_ dijo ella

_ ¿A qué te refieres?_

_ ¿Nos vamos o nos quedamos? ¿Estás bien amor?_

Cada vez que ella hablaba volvía a aparecer la dulce Sofía de siempre, ingenua, cándida a pesar de que sus movimientos felinos eran nuevos en ella, a pesar de cómo había follado como una diosa salvaje la noche anterior. Eran esas dos dimensiones de su personalidad que parecían ir en paralelo.

¿Marcharnos? La verdad es que ni siquiera había pasado esa posibilidad por mi mente.

_Tampoco podemos huir como si tuviésemos miedo_ dije

_Pero es que estoy muerta de miedo ¿Tu no?_

Joder, no podía decírselo, era más fuerte la fascinación que el miedo.

_ ¿Tienes miedo?_ dije

_Es que no me reconozco….no soy yo.... no comprendo cómo tú no tienes miedo…_

_ ¿Miedo de que? ¿De qué me dejes por él?_

_No bobo….eso ni se me pasa por la mente….tengo miedo de convertirme en……otra persona….de hacer cualquier cosa que a este subnormal se le ocurra_

_Es una locura lo que estamos viviendo_

_Joder, Albert….como te gusta esto….te gusta más que a mi yo creo_

Se acercó flotando hasta mí, sus piernas me rodearon, que poderío físico tenía, toda ella era fibroso, musculado y terso a la vez.

_Pero a ti te gusta….mucho también_ le dije

_Pues creo que se nota ¿no? ¿O crees tú que me he fingido los orgasmos?_

_ Es ...