La vecina con la que cumplí todas mis fantasías
Fecha: 03/01/2025,
Categorías:
Sexo Oral
Autor: EroticoDP, Fuente: CuentoRelatos
Mi novia vivía en el último piso de un edificio de cinco pisos. A pesar de ser mayores de edad, evitábamos gastar en hoteles por lo que acudía a su casa frecuentemente para tener sexo mientras sus padres no estaban. El sexo con ella era maravilloso, pero mi novia era un poco recatada, no le gustaba el sexo oral ni el anal. En varias ocasiones hablamos de ello, pero ella nunca aceptaba.
Un sábado por la noche, terminando de tener relaciones, tuve que salir a toda velocidad porque sus padres estaban por llegar. Bajé las escaleras con velocidad y estaba a punto de salir del edificio cuando vi que sus padres estaban en la entrada. Sin saber que hacer, pensé en subir, pero una puerta se abrió y una vecina me indico que entrara. Sin pensarlo entre de inmediato y cerré la puerta.
Ya hacía tiempo que había visto a esta vecina, era tres años más grande, tenía un cuerpo suculento, un par de tetas gigantes y un culo gordo y bien formado. Y además de toda su belleza, tenía fama de ser muy puta. Mi novia era bonita y atractiva, pero su vecina además de ser muy bella y tener un hermoso cuerpo, era una mujer sensual. Siempre caminaba meneando su cadera y se mordía los labios al terminar de hablar.
Por los nervios de ser descubierto por los padres de mi novia, no note que la vecina estaba enredada en una toalla. Y una vez adentro de su casa, me concentré en ver por el ojal de la puerta. Mientras veía, descubrí que los padres de mi novia permanecían afuera platicando con otro vecino. ...
... Continuaba observando por el ojal de la puerta cuando la vecina aprovecho y me agarró el pene por encima del pantalón. Instintivamente intente detenerla, pero al voltearme me beso y continuó agarrándome. De nueva cuenta intenté apartarla y ella se acercó a mi odio y en voz baja me dijo:
—voy a gritar.
Le suplique que no lo hiciera, fue entonces que ella dejó caer su toalla y me quedo hipnotizado viendo su cuerpo desnudo. Tenía unos senos grandes y sus pezones eran grandes y rosados. Tenía una vagina bonita y depilada. Mientras la veía pasmado, ella se hincó y comenzó a bajar mi pantalón. Quería detenerla, pero mi erección era tan evidente que opte por dejarme llevar. Me chupo el pene de una manera desquiciada, se lo metía completo a la boca y podía sentir su campanilla rozando la cabeza de mi pene.
Nunca había tenido esa sensación y estaba a punto de estallar cuando una idea se me vino a la mente. Cuando ella tenía mi pene hasta dentro, la sostuve de la nunca con fuerza para evitar que lo sacará y me corrí dentro de su garganta haciéndola toser. Sonreí mientras ella me veía fijamente tosiendo con sus ojos llenos de lágrimas.
A pesar de mi travesura ella continuó chupando mi pene hasta que fue perdiendo tamaño, después se levantó y camino hacia dentro del baño. Imaginé que traería papel para limpiar, pero en pocos segundo regreso y me beso. En medio de los besos, sentí que ella me pasó una pastilla, pensé en resistirme, pero era lo menos que podía hacer después de ...