Enseñando a mi hija a nadar - Relatos Eróticos

Enseñando a mi hija a nadar

Enseñando a nadar a mi hija

Esto paso hace unos años, me separé de mi pareja hace aproximadamente 4 años, el motivo es que soy muy caliente,

Nunca he guardado mis instintos y el punto de infección fue cuando me encontró con mi cuñada, morreandole el culo,

Siendo este el preludio les contaré un poco de mi hija, ella es una nenita de piel blanquita, boca muy fina y un cuerpecito si bien se ve menudito, está de formas muy ricas, tiene piernas hermosas y un culo respingón, sus tetas de tamaño pequeño pero sus pezones apuntan siempre al cielo.

Eran vacaciones de verano cuando me entra un msj de mi nenita, me dice...

-Hola quiero pedirte me enseñes a nadar.

-Ok, deja que salga de vacaciones y nos programamos.

-No debe ser ya. Es que la Mary va a tener su fiesta de 15 y le harán una fiesta en una alberca y me da miedo y pena ahogarme.

-jajaja pues si te ahogas ni verán cuando te pongas roja de pena...

-hay chistoso, entonces, cuándo??

- vente si quieres desde mañana, solo pídele permiso a la fiera, que ella no me quiere ni ver...

-Tu sabrás tus cochinadas que hiciste.

Después de mensajearnos un poco más, paso el día.

Llegó el día viernes y pase por ella, ese día iba con un shorts de mezclilla y un top, nunca había visto a mi nena con ojos ávidos de sexo pero últimamente la pequeña ya no era tan pequeña.

Llegamos a la alberca (pública por supuesto), y yo listo con playera y shorts y ella o dios mío...

Un traje de baño en dos piezas que ...

... si bien ya se lo había visto, por su desarrollo ya le quedaba más pequeño y cada que caminaba se le metía entre sus nalgas y de frente se le marcaba todo el contorno de su rica vagina y ya con pelitos finos.

El día transcurrió tranquilo yo tomándola de su estómago y/o espalda para enseñarle lo básico. Pero traia una erección que no controlaba en más de una ocasión la debió de sentir si no en su culo si en sus piernas y nalgas.

Segundo día.

Llegamos a la alberca y ya puestos con el traje de baños empezamos los calentamientos le enseñe y ayude a estirar sus piernas en eso estaba y yo concentrado cuando ella acostada con sus piernas arriba se ríe y se abre completamente de pies lo que me permitió ver la mitad de su vagina y esos pelitos que parecían castaño claro.

Ya con eso basto para que mi erección empezara a sentirse nos metimos y empezamos aunque a ser verdad mi inconsciente me fallaba y con la excusa le tocaba sus tetas que en un principio sentí como su cuerpo reaccionó a ese toque, para después normalizarlo ya no era consiente de mis actos y en una de esas ocasiones la abrace por atrás pegándole primero discreto mi pene entre su culo, sentí su cuerpo ponerse tenso pero incluso después de unos segundos ella echo su cuerpo para atrás para sentirlo ya sin reserva. Así terminó el sábado.

El domingo pase por ella muy temprano ya que descansaba y si íbamos más tarde, la alberca se llena de gente y no podríamos estar a nuestras anchas...

-pero que fresco está ...