METAMORFOSIS 203
Fecha: 03/03/2025,
Categorías:
Gays
Autor: Betelgeuse, Fuente: SexoSinTabues30
... Venancio, ya sentado en el sofá sintió la no presencia de la empleada, es que habían pasado pocos minutos, el “niño” tenía sentimientos encontrados y lo mostraba lanzando violentamente las cartas, en su mente y espíritu se desarrollaba una confrontación entre el cerebro y el deseo, tragaba saliva, la angustia por poseerle se incrementaba, su instinto le decía que debería hacerlo pero su mente se lo negaba poniendo alternativas, el “niño” estaba como un loco contando los segundos que rápidamente avanzaban, la música que escuchaba en la radio no era suficiente para calmarlo, el “niño” hubiese dado lo que sea para tener en ese momento poderes mágicos sobre el tiempo, pero como un simple mortal tuvo que esperar por unos instantes, y fue así que el “niño” pasó el tiempo labrando algunos cortos planes, estrategias, engaños que logren cumplir sus sueños de poseer a Venancio de una manera tierna juguetona cariñosa, sin tener que utilizar la fuerza, sin necesidad de ser violento y evitar ganarse el odio imborrable que llevaría en sus recuerdos toda la vida, por fin las agujas del reloj marcaban la hora pactada en su mente, el corazón aceleró su paso en un segundo y a cada paso que daba este trepaba más y más por el pecho hasta alojarse en su garganta, decidió subir, al abrir la puerta, estaba Venancio acostado cual sorpresa que para ahora lo encuentra despierto recibiéndolo con una sonrisa, estaba cubierto con la sábana, en su mente el “niño” se decía que el tiempo apremia, vio ...
... aquella figura de niño hermoso con el pelo lacio despeinado que aún le regalaba una sonrisa sincera, de amistad y algo coqueta, el “niño” estaba paralizado, solo se quedó observándole los pies descubiertos aquellos pies que mucho le llamaban atención por lo formados que estaban, Venancio se sentó en la cama por el extremo y luego se puso en pie cubierto con la sábana como si fuese un tribuno romano, dio unos pasos hacia el “niño” que estaba pasmado su cuerpo haciendo que reaccionara, Venancio no sabía que quería, así es que el tembloroso “niño” optó por agacharse hasta estar a la altura de su rostro como si fuese a prestar toda la atención del mundo a lo que Venancio le iba a decir, pero sintió una corriente que iba desde la punta del dedo gordo del pie hasta la punta del cabello, en tan solo dos segundos ya estaba el “niño” lo más excitado, algo que jamás en su vida había logrado sentir con el dueño de la abacería y tampoco la había sentido con Contardo o con otro chico de la escuela, ya sentía el “niño” que dos tibios y húmedos labios se habían postrado en su rostro, y como no había movido la cara por lo estático que estaba ya lo sentía bien, pues estos dulces tiernos y rojos labios fueron a dar nada menos que en la mitad de sus ansiosos labios, fue algo alucinante para el niño “sentir” la confianza de Venancio y… sentir su atracción mutua, estaban sentados en el extremo de la cama frente a frente y el sudor frío brotaba de sus frentes ya que no decidía por una de las 100 ...