Hombre mayor me hizo su esclava ...
Fecha: 27/03/2018,
Categorías:
Anal
Primera Vez
Tabú
Autor: mamitaonlyanal, Fuente: xHamster
... demore mucho en empezar a moverme en suave vaivén, ahora era yo la que me estaba comiendo su falo. Podía sentir como mis nalgas se pegaban a su ingle cuando mi culo se clavaba bajo su barriga. Me movía hacia la mesa sintiendo el roce de su miembro dentro de mi, para luego volver a clavármelo y sentir su peluda piel en mis muslos y nalgas.─Eso putita….comételo….muéstrame que te gusta…..muéstrame que te encanta─decía el vejete mientras acariciaba mi espalda.─Ahora mas rápido….¡mas rápido te dije¡─Volvió a azotar mis pompis con sus arrugadas manos.Acelere el ritmo de mis movimientos. Él no se movía, era yo la que, bajo el yugo de sus palmazos, devoraba su herramienta por entre mis piernas en un mete y saca frenético, como una yegua complaciendo a su jinete. Sabia que le encantaba mirarme dándome placer con su verga, sabia que gozaba mientras me dejaba golpear con tal de mantener su falo dentro de mí. El sentirme como su puta; el escucharlo insultarme, e insultar a mi marido, me tenia descontrolada. Mi único control se basaba en dejar que abusara de mi cuerpo, con tal que siguiera gozándome, me mantenía sumisa ante él.Luego de un rato de gozar de mis movimientos, sorpresivamente se aparto de mí, sacándomelo y dejándome un gran vació entre las piernas. Me volví a ver que hacia y me asuste al verlo subiéndose los pantalones.─Siga Don Roberto …por favor, siga abusando de mí─suplique jadeante.─Quiero seguir gozándote en tu cama puta, donde duermes con tu lindo maridito─dijo el ...
... viejo maldito. ─No, por favor Don Roberto, no nos humille así. Por favor se lo pido, haga la que quiera conmigo ¡pero no lo humille así!─ rogué levantándome de la mesa.─Solo por el placer de humillarlo a él, me voy a follar a su esposa en su propia cama y tú me vas a seguir; porque eres una perra hambrienta de verga y mi verga va a tu dormitorio. Y no demores puta o la leche que tengo guardada para ti, la voy a regar en su almohada─dijo sacando su desgarbado cuerpo de la cocina.Me subí el tanga; mi blusa, esta vez mojada por mi propio sudor, seguía pegada a mi cuerpo. No podía creer que aquel viejo me hubiera dejado botada en la cocina, asegurando que no podría aguantar el deseo de seguirlo. Quería humillar a Victor follandome en nuestra cama matrimonial. Recogí mi pequeña falda y pensé en ponérmela, ir a buscar a ese maldito viejo y sacarlo de mi casa. Me excite, parecía una drogadicta afligida por falta de droga; necesitaba verga he iría por ella sin importar las consecuencias. Cuando entre en la habitación me sentía como una niña que asiste por primera vez a clases; estaba nerviosa, ansiosa y asustada, aun así camine con un andar sensual y orgulloso. Él estaba desnudo junto a la cama, solo conservaba unos viejos calcetines que al parecer no pensaba sacarse.─Ven acá Maria, ven donde mis manos te alcancen. Anda, complace a Don Roberto, este viejito que te dará tu merecido─dijo el miserable vejete. Me acerque a él, como me lo ordeno, sus manos recorrieron mi trasero y disfrutaba ...