La viuda y el amigo de Rafa - Relatos Eróticos

La viuda y el amigo de Rafa

Rafa se prodiga como un auténtico bisexual siendo el macho de Marisa y mío y sacando su parte más guarra.

Hemos llegado a conocer un par de amigos maduros bisexuales con los que hemos compartido momentos de lujuria y placer.

Este encuentro es con uno de ellos que llamaremos Pedro cincuenta años uno setenta y cinco de altura sobre los 80 kilos una verga de buen tamaño sobre los 18 centímetros y gruesa buenas pelotas buenas nalgas un cuerpo con algo de gimnasio depilado sus partes íntimas y con algo de vello corporal atractivo versátil y también digamos bastante guarro aun siendo bisexual en este caso le gusta más los hombres que las mujeres y en sus tríos se nota.

Me preparé a conciencia aquel día mi lencería más sexy bien maquillada vamos una auténtica madurita cachonda bien depilada mi intestino bien vacío.

El encuentro era en casa de Pedro y Rafa nos llevaba a Marisa y a mí, salimos de casa de Rafa descendiendo por el ascensor hasta la zona de garajes, con el morbo que eso llevaba al ir yo travestida completamente y Marisa con unas pintas de fulana entrada en años el ascensor compartimos besos y caricias entre los tres.

A las cuatro en punto estábamos aparcando el coche al lado de la casa de Pedro 100 metros nos separaban del portal y por suerte no nos cruzamos con nadie ya dentro del portal y en el ascensor los besos calentaban lo que iba a ser la sesión de sexo.

Arriba y tras la puerta se encontraba Pedro completamente desnudo con su polla bien erecta ...

... ya la primera en recibir un buen morreo fui yo Marisa a continuación y Rafa después de halagarlos tanto a Marisa como a mí lo putonas que veníamos nos dirigimos a una habitación donde no había muebles y sí dos colchones en el suelo cubiertos por sábanas preservativos unos vasos de agua y algunas cosillas más.

Raza se apresuró a quitarse la ropa mientras Pedro ya me tenía acogida por la cintura y sobaba mi culo mientras su lengua rebuscaba en mi boca apasionadamente en un beso lascivo y guarro, obligándome a ponerme de rodillas y empezar a chupar aquel bergote la mamada se la hice tragando y en salivando aquella majestuosa poya y rechupeteando sus grandes huevos hasta que cambiando de postura me enseñó el camino para chupar su ano bien rasurado y como se habría sido follado hacía unos minutos ya que mi lengua se deslizaba fácilmente traspasando el esfínter y sintiendo un sabor dulzón que luego supe que solía utilizar un colorante para que fuese agradable el beso negro.

Marisa y Rafa estaban en pleno apogeo a esta solo le quedaban las medias negras y estaban enfrascados en un auténtico sesenta y nueve en el que ambos jadeaban y suspiraban aceleradamente era un deleite verdes disfrutar mientras Pedro recibía mi lengua cada vez más profunda en su ojete dando muestras de su excitación y de mi buen hacer.

Cruzándose en la cama también llegó hasta Rafa para ayudando a Marisa a comerle la verga este mientras yo seguía con mi beso negro Marisa llegó al orgasmo y Rafa estuvo a ...