1. Me volví la perrita de mi papá


    Fecha: 24/07/2025, Categorías: Incesto Autor: Charapola, Fuente: CuentoRelatos

    ... la abrió y me dijo: “Ven acá Paola”. Me acerqué gateando hasta la puerta, y ya que estaba en la entrada me dijo:
    
    “Salte, vamos a que hagas afuera. Si no vas a volver a ensuciar la alfombra.” Yo pensé que estaba jugando y me reí, pero de repente me agarró del cabello, y me empezó a jalar hacia afuera del cuarto y a decirme que obedeciera, que no fuera una perra desobediente. Pero yo estaba totalmente desnuda y obviamente me resistí, pero mi papá me jalaba más fuerte hasta que por fin me sacó al pasillo del motel.
    
    Y ahí estaba yo, completamente desnuda y a gatas en el pasillo de un motel. Un chico iba pasando por el pasillo y cuando vio que mi papá me sacó del cuarto se quedó totalmente paralizado. Mi papá lo vio y le dijo: “No te preocupes, es mi perrita, pero no muerde. Se llama Paola. ¿La quieres acariciar?”. El chico no sabía qué decir, pero mi papá insistió: “Ándale acaríciala, no te hace nada. ¿Verdad que eres buena perrita Paola?”. Yo sólo asentí con la cabeza y entonces el chico se acercó despacio, extendió la mano y me agarró la cabeza, Pero mi papá le dijo que me acariciara bien.
    
    Poco a ...
    ... poco el chico se sintió más confiado y empezó a acariciar más partes de mi cuerpo, yo también empecé a disfrutarlo, pero cuando el chico vio mis pies se sorprendió y dijo: “Su perrita tiene unos piesotes!”. Y mi papá le respondió: “Sí, esta perra tiene unas patotas, y le encanta que se las llenen de leche. ¿Quieres probarlas?”. Entonces yo alcé mis pies y el chico me empezó a agarrar los pies y a jugar con mis dedos. Yo no pude resistirme y empecé a gemir. Y el chico me los empezó a chupar. Al mismo tiempo mi papá se acercó y me empezó a meter la verga a la boca. Fue algo surreal, estaba en el pasillo de un motel, desnuda, en cuatro como si fuera una perrita, mamándole la verga a mi papá mientras un desconocido me chupaba los pies.
    
    Entonces mi papá le dijo al chico: “Ya viste qué obediente es mi perrita. Si quieres métele tu verga para que veas lo obediente que es.” El chico se sacó la verga, se me agarró de la cadera y me metió toda su verga en la vagina. Hicimos tanto escándalo que la gente de otros cuartos empezó a salir para ver qué estaba pasando. Y yo nunca me esperé lo que mi papá les dijo a todos… 
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