1. Todo gracias al accidente con el cierre de mí pantalón (parte final ). 10)


    Fecha: 07/04/2024, Categorías: Sexo con Maduras Tus Relatos Autor: Koko, Fuente: RelatosEroticos-Gratis







    Mis manos masajeaban toda su espalda luego sus hombros y sentía como sé iba relajando mi abuela y cerraba los ojos su respiración ya era más rápida y mientras mis manos le tocaba su cuerpo, me puse sobre ella le frotaba mí verga en medio de sus nalgas. Éso la calentó mucho más y comenzó a moverse queriendo que ya le metiera toda mí pene.
    
    -! Ohhh... Koko.mm..tu sabes cómo prenderme cada vez más. sigue..mm . así.. ohhh.. ohh..!
    
    -! Abuelita siempre buscaré que disfrute como debe de ser, también quiero recibir lo mismo de  usted..!
    
    Y fui introduciendo lentamente mi verga,  pero mis embestidas eran lentas ya el era momento de reclamar su agujero anal, que mí abuelo no pudo o no sé atrevió a pedírselo. Entonces mi dedo índice le acariciaba la entrada del recto y al inicio con cuidado le iba metiéndole el dedo, cuándo me pareció que iba a reclamarme algo, mis embestidas sé hicieron más potentes y ahí empezó a gemir.
    
    -! Ahhh..ahhh .. mí niñoo... que ricoo ..!
    
    Y aprovechando que estaba gozando como se i tragaba toda mi verga por la caliente chucha le introduje todo mí dedo en su ano y no sé quejó entonces mí dedo empezó ahora a moverse en círculos y la oía como resoplaba mí abuela. Así que ahora eran dos dedos que tenía dentro del culo moviéndose mientras la penetraba.
    
    Quería meterle mí pene ya en su culo, era como tener el plato que tanto esperabas tanto tiempo y lo tenías tan cerca, así que puse la cabeza en
     la entrada de ano y fuí empujando, ahí mismo ella ...
    ... empezó a gritar y pedirme que por ahí NO, qué sé lo sacará.
    
    -! Aggg...ayyy.  mee duelee.. Koko.. tu abuelito nunca me lo metió por el culoo . !
    
    -! Abuelitaa. ufff.. déjeme metérselo un poquito, que rico sé siente como me ajusta..ahh..!
    
    Me aferré con las dos manos en sus caderas y empecé a empujar con sutileza, no podía negar que le estaba haciendo daño, pero yo sentía ya mucho morbo por lo rico como su esfinter me ahorcaba mí pene, se fue abriendo lentamente hasta que le introduje todo lo que su estrecho ano me permitió. Aunque mí abuela evitaba ya gritar, soportando mí pene cómo iba abriéndole el culo por primera vez, por eso lo acompañaba con caricias y bonitas palabras para que ella sé tranquilizarå.
    
    -! Abuelita que rico y calientito sé siente su culo ya sé cómo sé siente meterlo en el ano de una mujer, sí quiere sé lo sacó .?
    
    -! Empieza ya a bombear..?
    
    -! Estás segura abuela..?
    
    -! Ya me has roto el culo, Koko así que ahora sigue..!
    
    Los pliegues de su ano veía como sé abrían y ella gritó y jadeaba casi al mismo tiempo, volví a preguntar si sé lo sacaba pero me dijo que no que quería complacerme y lo único que sé me cruzo por la cabeza, fuè el frotarle su clítoris y pueda distraer su mente del dolor. Ya la estaba cogiendo salvajemente por el culo a mí abuela, cada vez la ensartaba con más fuerza y quería durar lo máximo que pudiera, pero éso parecía ser imposible cómo apretaba su esfinter toda mí verga.
    
    -! Ahhh... abuelitaa... que ricoo. .!
    
    Y ella ...
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