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la tarde con la profe rubia.-
Fecha: 07/07/2024, Categorías: Anal Tus Relatos Autor: el mentor, Fuente: RelatosEroticos-Gratis
Todos los día la prof de Biología, la rubia como le decía, lo invitaba a salir a caminar, a conversar sobre la vida. Ella estaba casada, pero no estaba pasando un gran momento en su vida conyugal, sus hijos todavía niños se daban cuenta de las peleas de sus padres. La Rubia le contaba al mentor sus penas y cuitas de amor, que no existía , este sabía que también en esos cuentos había un poco de picarda de mujer no atendida.- Pero no quería tirarse el lance todavía porque estaba atendiendo a otra profesora un poco más grande que también estaba necesitada de atenciones sexuales. la rubia estaba muy buena, tenía unas tetas redondas grandes, piernas largas, boca de labios pulposos y ojos celestes muy expresivos.- Un día la rubia lo invito a su casa a tomar un té y charlar y entre sonrisas le dijo- los niños están con la abuela y aquel está viajando.- estoy sola.- El mentor dijo que si y se fueron al apartamento de la profesora.- Este estaba ubicado en un complejo de viviendas muy lindo, y era muy espacioso y soleado. Llegaron , se sentaron en un sofá de dos plazas, la rubia preparó el té, y se sentó la lado del mentor, estirando sus largas piernas enfundadas en medias oscuras y terminaban en zapatos negros de tacos altos. El mentor siniió que su verga se endurecía un poco, y ella se acercó como una gallina al mentor este la abrazo en ...
... forma calida y le busco suavemnete lo labios pulposos que estaban calientes , y porntos pra recibire aquellos besos apasionados. El mentor además de besarla con pasión, le acaricó por encima de su camisa los senos, estaban duros y grandes, los pezones bien altos, se condundieron en besos y gemidos, ella busco entre el pantalón del mentor la verga, la destrabo de la ropa, la dejo afuera y acercó aquellos labios para besarla y chuparla, minetras decía hacema caricias en en la concha.- asi, así, asi, El mentor se estaba semidesnudo igual que la rubia, pero el sillón era incomodo para cojer, entonces ella lo hizo parar , mientras lo besaba lo llevaba hacia un cuarto, y en una cama de una plaza lo recostó, . le dijo cojeme acá , en la cama grande no,. El mentor la empezó a besar suavemente en los labios, en le cuello, en las tetas, en el estomago, y luego le pasó la lengua por la vagina, ella gemía , y le decía sos divino, cojeme, cojeme Cuando la sintió bien caliente toda mojada, ñe fui introduciendo lentamente el pene en su cuerva y ella levanto la cintura me abrazo con sus muslos y se la enterró hasta el fondo, así así asi cojeme asi, gritaba la rubia Tres veces la coji esa tarde como debut, en aquella cama de una plaza, Desde ese día una vez por semana la profe rubia , gran cojedora , va una o dos veces a mi estudio , el mentor,
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