La señora Ysabela y yo (5)
Fecha: 03/04/2018,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... desaforados de la señora Ysabela. - Ayyyyy, damé duro, mi niño... ¡¡¡Cógeme durooo!!!- gritó adolorida. Yo continuaba entrando y saliendo con la vitalidad de mi juventud, y los fluídos vaginales de la señora Ysabela se deslizaban a lo largo de mi verga y huevos. Aún, a pesar de los días, era muy excitante la visión de tener a mi vecina casada entregándose dócil al acto sexual. Dirigí una mano hacia el punto de acoplamiento y sin mediar palabra alguna, retiré raudo mi verga de la vagina y la enterré, casi por completo, en el ano apretado de ella. - Uyyyyy, que sorpresota.- dijo recibiendo contenta mi iniciativa. Nuestros cuerpos se mecían cómplices, calientes y sudorosos, sin importar que los gritos y gemidos fueran escuchados por los vecinos. Otra vez, cogí mi pene y este volvía a invadir su húmeda vagina. Unos instantes después, una vez más, su ano era castigado por mi chipote, y así seguí, una y otra vez a intercalar sus orificios. - Mi niño, mi niño... ¡eres mágico!- gimió transfigurada. - Te ...
... gusta mucho, ¿verdad?- pregunté eufórico a la vez que la jalaba del cabello. - Sííííí.- gritó ahogada en su orgasmo. Las contracciones vaginales de la señora Ysabela apretaban mi verga y esta cedió en una copiosa lluvia de semen. Apoyados sobre el respaldar del sofá, descansábamos sin movernos de la pose mientras las caricias recorrían nuestra piel. - Me ha gustado mucho, mi pequeño.- susurró arreglándose el cabello. - A mí igual Ysa.- respondí con la cabeza apoyada en su hombro. - ¿Y de dónde has sacado todo esta ocurrencia?- preguntó curiosa. - Pues, la verdad es... que de un vídeo porno.- respondí sonriendo. - Ah, vaya, vaya, vaya.- dijo admirada. Ya decía yo de dónde habías aprendido eso. - Je,je,je... pero muy bien que te gustó.- dije. - Por supuesto que me gustó y mucho más de lo que piensas.- dijo besándome la mejilla. - Por lo que vi y escuché así me imagino.- dije abrazándola. ¡Podría hacerte el amor toda la vida! Nos reímos y besamos apasionadamente para luego continuar como todos los días.