CHICA EXCITADA EN UN MARTES DEL CLUB DE LAS BRAGAS
Fecha: 08/04/2018,
Categorías:
Lesbianas
Autor: isabela, Fuente: RelatosEróticos
... dedos por la pantalla del móvil, se agachó para ver por segunda vez el móvil y entonces se puso a leer el primer mensaje del día: �En donde te encuentres ahora, y como te encuentres: parada, sentada, recostada o caminando, siénteme en tu vagina, siente mi lengua metiéndose entre tus labios vaginales. Paso la punta de mi lengua por tu orificio de entrada, siente esa sensación que deja mi lengua al recorrer suavemente en medio de tu vagina ascendiendo hasta donde se esconde tu adorable clítoris.� Y ella sentía que le abandonaban las fuerzas para seguir agarrada del pasamanos, se sentía emocionada. Una ola de excitación subió por su vientre, sus ojos se cerraron por un instante y sintió su clítoris despuntado hacia afuera y como un leve chorrito se escapaba del interior de su vagina, no dijo nada, solo suspiro hondamente, se agacho, pensó en la humedad que salía de su vagina hacia su tanga rosa, no quería que nadie se diera cuenta de aquello así que se resistió y asentó bien los pies en el piso del bus, como tenía las piernas levemente separadas decidió juntar sus muslos, sintió su calor al juntarse sus muslos, sintió los bordes de su tanga en las entrepiernas pero no sentía ninguna humedad, pudo respirar tranquila. Luego miró a su alrededor y se sonrió pensando que lo que ella sentía era confidencial y que los demás ni se imaginaban de lo que ella acababa de sentir. Llegó a su facultad con una sonrisa en los labios, disimuló su humedad, siguió su camino hasta llegar a su salón ...
... de clases, ahí como siempre se saludó con sus demás compañeras y empezó su jornada de clases, sabía que le esperaba un día largo, una jornada en que se amontonaban las materias todo el día, pero eso no le importaba, ella seguía feliz y sonriendo porque había comenzado el día como a ella le gustaba comenzar todos sus martes. Habían transcurrido las horas y después de un descanso, cuando se disponía a comenzar otra sesión de clases y ella iba a acomodarse en su asiento, sonó nuevamente el móvil, desde que salió de casa ella lo traía en la mano porque sabía que de eso dependía la actividad de este martes en el club de las bragas rosa. Entonces al escuchar sonar su móvil, le volvió ese nerviosismo mezcla de placer e inquietud, se sentó rápidamente en su asiento, miró a su alrededor a sus demás compañeras que no la tomaban en cuenta, miró a la maestra que ya estaba en frente sentada tras su escritorio, quien también miraba la pantalla de su móvil, quizá le había llegado el mismo mensaje y compartían el mismo secreto, se sonrió un instante y abrió su correo en el móvil, entonces ahí estaba el segundo mensaje del día que decía: �Aun quiero sentir la frescura de tu aroma femenino, recoger en el borde de mi lengua toda esa humedad que sale de tu interior y llevármela a la boca, a cambio, voy a dejarte la huella de mis labios juntando mi boca a tu vagina para darte un beso húmedo.� Volvió a sentirse húmeda, más húmeda que nunca, demandaba de esa boca y de ese beso que deje sellada su ...