1. Aventuras en pañales.


    Fecha: 15/04/2018, Categorías: Gays Autor: Tsukidiaperboy, Fuente: SexoSinTabues

    Por algunas razones había llegado virgen a los 21 y perdí la virginidad con alguien que tenía una enorme verga y no le molestaba mi pequeño secreto. Este es mi primer relato, pero leyendo los demás me armé de valor para contar mi primera vez. Soy un chico delgado, piel morena, cabello oscuro, ojos oscuros y a pesar de no hacer ejercicio mantenía mi cuerpo bien definido lo cual me daba un trasero pequeño pero durito. Suelen decirme que soy muy guapo. Ya había tenido algunos novios pero por una razón u otra nunca llegamos al sexo y desde los 15 años por culpa de un doctor que le importaba poco su trabajo sufría de incontinencia urinaria, por lo que tenía que usar un pañal si no quería mojar mis pantalones. Es por esta última razón que había tenido pocos novios, no me aventaba a intimar con cualquier chico por su posible reacción. Y así fue como llegue a la universidad y pasó el tiempo y yo me dedicaba a estudiar y a salir con algunos amigos. Un día vimos un cartel de que se abriría un grupo LGBT y mi mejor amiga en ese momento era lesbiana y súper abanderada, por lo cual me convenció de asistir. El grupo simplemente buscaba crear un espacio para personas LGBT y ayudarlas a sentirse cómodas con su sexualidad, entre pláticas y juegos. Total, uno de los chicos comenzó a hacerme la plática cada reunión y comenzamos a salir a comer y cosas así. Poco a poco comenzamos a pasar más tiempo juntos un día paseábamos por un parque y aprovechamos para perdernos por ahí y entre plática y ...
    ... abrazos comenzamos a tocarnos, yo no permitía que el metiera mano a mi pantalón, pero eso no evitó que me incara y le bajara los pantalones. Cuál fue mi sorpresa al ver su enorme verga, después me enteraría que le media 23 cm, gorda y bastante curvada. Su gran tamaño lejos de asustarme hizo que se me hiciera agua la boca y no dude en tragármela toda. La recorría con mi lengua, bajaba a sus huevos y luego volvía a subir para metérmela en la boca todo lo que podía. Continúe chupandosela hasta que acabó en mi boca, me trague su leche y aproveche en lo que se acomodaba la ropa para alejarme un poco. Cuando me alcanzó trato de que yo me dejara hacer lo mismo, pero me entró el miedo y le dije que tenía que llegar a mi casa. Así pasó algún tiempo y él estaba cada vez más sacando de onda por mi negativa a dejarme tocar, hasta que un día estábamos fajando y comenzó a besarme el cuello y sin que me diera cuenta desabrocho mi pantalón y metió la mano, fue hasta que me apretó la verga que yo me di cuenta que mi secreto se había revelado. Trate de quitarle la mano pero puso mis manos en mi espalda y no me lo permitió. -Tranquilo bebe, no pasa nada- me susurró al oído mientras me besaba la oreja y seguía masajeando mi verga sobre el pañal. -¿Esto es lo que te daba tanto miedo que descubriera? Yo no podía articular palabra de lo excitado que me tenía, lentamente desabrocho el pañal de un lado y comenzó a masturbarme, agarraba mi verga firme, bajaba y subía su mano lentamente. Yo había perdido ...
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