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Una familia incestuosa. Parte 4
Fecha: 18/04/2018, Categorías: Incesto Sexo en Grupo Autor: Mago21, Fuente: CuentoRelatos
Mayo paso como una exhalación por culpa de los exámenes y de la falta de tiempo para hacer otra cosa que no sea estudiar. Durante este tiempo mis hermanas y yo no hemos podido follar; ni siquiera una mamada o una paja. Por fin llegaron las vacaciones y con ellas, tres meses libres para poder hacer todo lo que queramos. Estaba tan emocionado de poder por fin volver a sentir el coño de mi hermana melliza rodeando mi polla, sus tetas presionando mi cuerpo mientras mis manos recorren toda su figura. Y no puedo olvidarme de mi hermana mayor y de sus enormes pechos y de las ganas que tengo de chupárselos. Volvía a casa pensando en todo esto y mi polla estaba a punto de reventar. Al abrir la puerta no me dio tiempo ni a soltar las llaves cuando Mery se abalanzó sobre mí y me dio un fuerte beso en los labios. Mi boca se abrió para recibir este inesperado, aunque placentero regalo y, cogiéndola por la cintura la lleve a mi cama. La tumbé boca arriba sin separar nuestras bocas y le fui metiendo la mano por debajo de la camiseta hasta llegar a su pecho y comprobé que no llevaba sujetador. Le arranque la camiseta en un segundo y sus preciosos pechos se quedaron al descubierto, con sus pezones rosados incitándome a chuparlos. Lo hice. Parecía un bebe muerto de hambre. Mientras ella me iba desabrochando la cremallera de los pantalones y palpo mi polla tiesa. Me incorpore, me quite también la camiseta y los pantalones, y le ofrecí mi miembro para que me lo chupara. Se quitó los pantalones y ...
... me lanzo las bragas húmedas de sus fluidos a la cara. Las tiré al suelo y cogí su cabeza con ambas manos para dirigirla a mi polla. De pronto oímos como la puerta principal se abría. Nos quedamos paralizados y en un segundo empezamos a coger nuestra ropa. Las pisadas de alguien empezaron a subir por las escaleras y nosotros, medio desnudos nos escondimos rápidamente en mi armario. Los pasos se iban parando cada poco hasta que llegaron a la puerta de mi habitación. Mire por la abertura que había dejado entre las puertas. Nico se encontraba de pie mirando mi habitación. Llevaba puesto una camiseta azul de manga corta y unos pantalones de chándal. No nos parecíamos mucho. Es el más bajito de la familia y tiene los mismos ojos marrones de mi padre y mi hermana Roció. Tenemos una buena relación y siempre he estado cuidando de él, ya que es más retraído y tímido. Veo que entra y recoge algo del suelo que no logro ver hasta que lo alza y veo que es unas bragas rojas. Me giro hacia Mery: - Se te ha olvidado coger tus bragas- le digo en voz baja. Su cara adopta una expresión de sorpresa, me empujó para mirar por el hueco y volvió a ocultarse. Cuando oímos la puerta cerrarse salimos despacio y sin hacer ruido por si volvía: - Por un pelo -dije sentándome en la cama mientras me ponía la ropa. - Pensé que íbamos a estar solos. Cuando hable con él dijo que se iba a la piscina de una compañera de clase… por cierto -dijo dando una vuelta sobre si misma- ¿Dónde ha dejado mis bragas? Miramos ...