Más que compañeros
Fecha: 20/04/2018,
Categorías:
Anal
Sexo con Maduras
Voyerismo
Autor: Sceptico, Fuente: xHamster
... camilla, sus mulos. ¡¡¡Ufff qué mujer, qué corrida impresionante!!! Gemía y gemía sin parar.La levante de la camilla y la apoyé sobre el sillón tantra, completamente inclinada, su culo expuesto hacia mí, chorreando su flujo entre las piernas, mi mano empapada se acercó hacia su culo, lo acaricié, metí un dedo en su agujero, entró fácil, lo saqué metí dos. Su tremenda corrida mezclada con su flujo vaginal hacían de excelente lubricante, mis dos dedos entraban y salían ya fácil de su culo. La oí gemir algo, seguí, sabía que su culo era virgen, Daniel me lo había confesado, y sólo de pensarlo me estaba poniendo malo.Agarré mi polla con la mano, baje bien toda la piel dejando el capullo bien libre, lo apoye es su culo y apreté, despacio, muy despacio, la volví a oír gemir, estaba completamente entregada, apreté un poco más, vi como mi polla se hundía despacio entre sus dos nalgas perfectas, soltó un gritito, e hizo ademán de quererse escapar. Sé por experiencia que ese es momento crucial para abrir bien un culo, la agarré con fuerza de las caderas y le di la embestida definitiva, mis huevos rebotaron contra sus muslos, seguí mis embestidas, cada vez más ...
... encendido por sus jadeos, sus gritos, sus déjame ya joder, dame más fuerte, más, más, esa adorable mezcla de dolor y placer que proporciona una polla follando un culo.Estaba sudando, mi polla a punto de reventar, mis manos seguían aferradas a esa presa maravillosa de sus caderas, cuando estaba a punto de correrme se la saqué de golpe, sin que se moviera, me dirigí hacia su cabeza, la cogí del pelo y la dije, chúpamela. Se la metió en la boca. No la chupaba nada mal, se le tragó hasta dentro un par de veces, lo que unido a mi excitación, hizo que me corriera casi de inmediato, su cara, esa cara de princesa, de señora bien, de modales exquisitos, se llenó de leche, de semen de macho ajeno resbalando por sus mejillas, su barbilla y su cuello. “Eres impresionante acerté a decir” mientras acariciaba su cara mezclada con mi semen, su sonrisa entrelazada con mi pasión, su candor despertando a la vida.La recosté en el diván para hacerle la mejor comida de coño que hubiese podido soñar mientras miraba de reojo a la cámara que no había perdido detalle de lo que había pasado allí.Estaba seguro de que a Daniel no le iba a defraudar el video que le había prometido.