La comida de fin de año de la oficina
Fecha: 21/04/2018,
Categorías:
Intercambios
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... descorchar la botella de champaña y de inmediato me regrese a un punto donde los pudiera ver sin que ellos me vieran, mi amigo la sostenía de una pierna, luego giro su mano y la “sostenía” por la parte interna de su muslo, sus ojos estaban clavados en el culo de mi esposa, y su mano estrujaba un muslo de Gaby que no se inmutaba de lo que le hacía Toño seguía colocando foquitos. Al momento que Gaby empezó a bajar un escalón las manos de Toño se fueron a sostener las nalgas de mi mujer pues no resistió la tentación de acariciarlas. Fingí que salía de la cocina y les comenté; quedaron perfectas las luces, ellos afirmaban con la cabeza, los ojos de mi esposa estaban rasgados síntoma de que está muy caliente, Toño trataba de ocultar su bulto, descorché la botella de champaña y serví tres copas, yo sabía que eso es veneno para Gaby pues con la champaña se desinhibe totalmente y es capaz de hacer cosas impensables sin importarle nada; como una vez que veníamos de una boda le dieron ganas de hacer pipí en el auto, se quitó las pantaletas se bajó corriendo del auto y lo hizo en un camellón de una importante avenida, mientras los taxis le tocaban el claxon ella solo reía mostrando sus nalgas a todo el mundo. Brindamos por la navidad, Gaby abrió una caja de esferas y las empezó a colocar en el árbol. ¡Primero las más altas! nos exclamó; subía a la escalerilla tres escalones y se estiraba de puntas su vestido subía a media nalga, se veía preciosa con su atuendo de niña puta, a Toño ya ...
... no le importaba si yo lo veía, él estaba feliz viendo sin parpadear a mi esposa, y sin darse cuenta me comentó: Está buenísima ¿verdad?. Le respondí sí está muy rica y vieras que rico coge. Entonces le cayó lo que me había dicho y mi respuesta lo avivó. ¡Me imagino!. Jejeje. Con la mirada perdida en las nalgas de mi esposa que seguía colgando esferas sin inmutarse de la presencia de Toño, mostraba hasta el chipote de su panocha cuando se agachaba a recoger una esfera. Volteo y nos preguntó; ¿Qué no me van a ayudar?. Sí, pero primero vamos a tomar una copa de cruzadito le comentó Toño. ¡Bueno sírvanlas! que me estoy muriendo de calor. Nos respondió con voz muy sexy. Llenamos las copas entrelazamos los brazos y las tomamos a fondo, mi amigo y yo ya estábamos ebrios pues además traíamos las copas desde la comida, Gaby estaba entre nubes con la champaña con sus mejillas rojas, y que se la suelto a mi esposa; ¿por qué no te quitas el vestido?. tienes mucho calor, Toño brincaba de gusto y aplaudía, Sí Gaby… Es como si te quedaras en traje de baño, quítate el vestido. Mi esposa me dice con voz muy sexy: Pues si quieres, quítamelo tú mi amor, adelante. Entonces le bajé el cierre y ella subió los brazos retándome para ver si me atrevía, entonces empecé a jalarlo por arriba de su cabeza mientras ella movía sus nalgas de lado a lado mientras se lo sacaba, los ojos azules de mi amigo se abrían como platos, mi esposa solo quedó con zapatos, pantaletitas de red y un micro sostén negro. Como ...