Descubriendo mi perversión.
Fecha: 11/09/2025,
Categorías:
Gays
Incesto
Autor: Bohasewiki, Fuente: SexoSinTabues30
... observando mi cuerpo con ojos de admiración más que de calentura, pude notar su pequeña erección y le dije que sería su turno de mostrarme su cuerpo, lo levanté en la cama para que estuviera a mi altura y muy suavemente le quite la ropa, recordando todas esas veces que lo metía a bañar conmigo, pero ahora era diferente, lo estaba desnudando para hacerlo mío.
Mi hijo no suele ser tímido pero en esos momentos de verdad mostraba mucha vergüenza, se veía muy tierno y hermoso estando apenado tapándose su pene erecto de unos 7 centímetros. Acosté a Tomás en la cama y para enseñarle más cosas comencé a hacerle sexo oral, su cuerpo temblaba cada vez que lo succionaba y me decía que le daba cosquillas, no duró mucho hasta que terminó por sacar un líquido y ahí le expliqué que había tenido su primera eyaculación, aún faltaba para que le saliera semen como tal pero ya estaba en proceso, le dije que si quería ver cómo el mío sacaba el mismo líquido, ya con un poco más de confianza sonrió y dijo que sí, «Ven hijo, chupa la verga de tu padre» fue lo que le dije antes de tenerlo succionando mi pene como si fuera un dulce, lejos de mostrar asco o alguna otra emoción se mostraba con ganas de estar pegado en mi entre pierna, tuve que ayudarle a chuparla ya que era un poco malo, pero aún así lo disfruté bastante, «Papi, me gusta mucho la tuya, sabe rico» decía mi niño.
Cuando sentía que estaba por correrme aparte a Tomás y lo puse boca abajo, le dije que le volvería a hacer cosquillas ...
... pero ahora en su traserito, cómo si ya supiera que hacer levantó su culito suave, blanco y lampiño para mí, ver ese huequito tan rosado y apretado me volvió loco y rápidamente me puse a chupar, le daba nalgadas, metía mi lengua dentro de su recto, le dejé su ano rosado escurriendo mi saliva mientras el gemía y se retorcía.
Saqué un lubricante que tenía en un cajón que era para relajar la zona anal, (ya me había cogido a mi esposa por ahí) le aplique una buena cantidad en su culito y también a mi verga que chorreaba gotas de semen, me dispuse a meterle los dedos para hacerlo aguantar mi verga y que no le doliera tanto, aproximadamente unos 10 minutos estuve jugando, metiendo mis dedos dentro de mi pequeño Tomás. Le di la vuelta para poder observar su rostro mientras lo penetraba y poco a poco fui metiendo mi pene en el, le dolió bastante así que estuvimos un buen rato intentando, me pidió muchas veces que la sacará porque le dolía pero le dije que esto era lo que hacian los padres cuando querían mucho a sus hijos, era una forma de mostrar amor, y le dije que me ponía triste el saber que no le gustaban mis muestras de afecto, cambió un poco su rostro a uno de lástima y me dijo que si le gustaba, que siguiera metiéndola, muy felizmente le di las gracias ya que los hijos cuando se dejan penetrar están diciendole a sus papás que también los aman, me dijo que ya no le dolía tanto y que me amaba muchísimo, «Entonces si me dejas meter mi pene dentro de ti? Te amo mucho, hijo» «Si ...