VIOLANDO A LA PUTA DE MAMÁ. QUINTA PARTE. - Relatos Eróticos

VIOLANDO A LA PUTA DE MAMÁ. QUINTA PARTE.

... salvajes!… Jejeje…

Antes de que Jordy se abalanzara sobre mamá, ella sacó de otro cajón, el de la mesa de noche, un poco de cocaína, y lo esnifó, también le ofreció a Jordy y mientras se drogaban comentaban lo siguiente:

JORDY: ¡Vaya cerda que es usted, señora Lolachela!… ¡¿Le gusta que la dominen, maltraten, insulten y golpeen?! ¡Debería hacerse respetar un poquita, so puta! ¡Quiérase y tenga dignidad al menos un poquito en la vida, señora!… ¡Hágase revisar de un buen psicólogo, hermana!…

MAMÁ: ¡La autoestima y la dignidad me importan un culo cuando me arrecho a causa de un macho vergón, vulgar, grosero y dominante que me encienda a vergazos, a putazos, a puños y a cachetadas!…

JORDY: ¡Uy, jueputa! ¡Qué cerda es usted! ¡Ese modo de pensar suyo es patético! ¡No es propio de las damas! ¡Yo soy todo un caballero y me gustan las delicaditas y decentes!… Jejeje… (no es cierto)… ¡Pero no importa, ya que le gusta lo salvaje pues yo la voy a desbaratar a punta de ruda y violenta vergota, malparida de mierda!

MAMÁ: Jejejeje… ¡Ay, mi Dios!… Jejeje… ¡Lo que se me viene encima!… Jejeje… ¡Bueno… qué más me queda… no puedo luchar contra lo inevitable ni ir en contra de la corriente! ¡¿Te gustan las damas?!… Jejeje… ¡Como soy una dama entonces me parece mejor a las ...

... buenas que a las malas!… Jejeje… ¡Tocará colaborar con muchísimo gusto, mi amor!… Jejeje… ¡Fóllame con toda! ¡Dame duro, cariño hermoso!… ¡Golpéame con tu palote! ¡Destrozame la cuca y el culo con tu violento Guamote, papazote!…

JORDY: ¡Esas palabras me gustan, señora!… Jejeje… ¡Pinche loca!… ¡Aunque me gustan esas palabras la verdad es que no sabe ni lo que habla esta hijueputa!… ¡No dice sino solo incoherencias y contradicciones!… Jejeje… ¡Ya le hizo efecto la coca! ¡Qué rápido!…

MAMÁ: ¡¿Cómo quieres que me ponga? papito!… ¡Digo… ¿en qué posición? amor!… jejeje…

JORDY: ¡Acuéstese, doña perra! ¡Usted abajo y yo encima, vil escoria!…

A la vez que me pajeaba y que mamá y Jordy se besaban y alegremente empezaban a hacer el amor busqué la llave, la encontré, abrí el cajón y ¡qué sorpresa! Una excelente y generosa cantidad de consoladores, dildos, condones, lubricantes, látigos, esposas, sustancias afrodisiacas, revistas y películas porno había en él, ese cajón era el cielo de los artículos eróticos y sexuales.

Me acerqué con ese pesado cajonado de elementos y juguetes sexuales, lo puse cerca de la cama y aproveché para esnifar un poco de cocaína mientras me pajeaba mirando a mamá y a su nuevo novio y amante follar como locos.

CONTINUARÁ…

ESCRITO POR SIREMIS.