La nena de la vecina - Relatos Eróticos

La nena de la vecina

... Cada vez sus gemidos eran más fuertes y me ponía más caliente. Deje su vagina para ir a su culo y lamerle el asterisco ✳ mientras masturbaba con mi mano su vagina. La nena parecía estar poseída. Se retorcia y gemia muy fuerte. Verla tan cachonda y disfrutando tanto hizo que tuviera ganas de penetrarla. Saque mi verga totalmente electa y mojada y la puse a la entrada de su conchita. -Que haces? -Te voy a meter el pene. Eso nunca se lo he hecho a tu mamá. -Ah ya...bueno metemelo entonces-contesto sin saber lo que le esperaba, así que le advertí. -Tal vez te duela un poco nena, pero luego te va a encantar. -Bueno..-dijo jadeando. Poco a poco fui metiendo mi verga en su estrecha vagina bien mojadita. No entraba, así que le hice oral de nuevo chupandola lo más rico que pude. Intenté de nuevo y esta vez si se empezó a perder de vista mi verga al entrar en esa cuevita recién estrenada. -Aaaay..duele duele..sacame eso de ahí..-se empezó a quejar. Pero la sensación era demasiado rica colo para detenerme. Sentía mi verga bien abrigada con el calor y humedad de esa rica vagina estrecha que apretaba mi miembro. -Espera...ahorita te va a gustar.-le dije metiendo más mi pene, todo lo que pudo ...

... entrar. --Aaaay..si..estoy empezando a sentirlo rico...uuuummmm...uuuuummm..que rico que rico.. Se la metí hasta el fondo. Su cuerpo se estremecia,pego un grito de placer "sssiiiiiiiii", su cuerpito temblaba,jadeaba. Fue su primer orgasmo, pero yo no acababa, así que continue. La folle y folle de perrito hasta venirme dentro suyo. -Te estás orinando dentro mio?-me dijo. -No nena. No es orin,se llama semen. A tu mamá le gusta tomarsela. Quieres probar? Ella asintió, saque mi verga de su coñito rojito de tanto mete saca, y le pedí que limpara el semen de mi pollo con su lengua. Así lo hizo hasta beberse la última gota, tal cual lo había hecho su mamá. Caí rendido a su lado. -Y? Te gustó? -Le pregunte -Claro. Estuvo muy rico. Gracias-dijo la nenita. -Cuando quieras lo hacemos de nuevo-propuse y ella asintió.- Nomas no le vayas a decir nada a tu mamá. Asintió nuevamente y me abrazó. Estuvimos tendidos un rato mas. Luego fallamos otra vez, esta vez en la pose de misionero, cabalgandome y patitas al hombro. Hicimos el 69 con algo de incomodidad, pero fue delicioso. También me folle a su mamá cuando regresó, pero esa es otra historia que luego les contaré. Solo les digo que la mujer es una salvaje.