Inicio sin culpa con mi hija. - Relatos Eróticos

Inicio sin culpa con mi hija.

Nos casamos muy jóvenes yo tenia 20 y ella 18 por que embarace a la que ahora es mi esposa y la mamá de mis 2 hijos, tuvimos la parejita pero con solo 3 años de diferencia cada uno.

A la edad de los 5 años de Ana, mi esposa y yo nos dimos cuenta que empezaba a autoexplorarse específicamente cuando ella o yo la terminabamos de bañar, pero su mamá le decía que no se tocara, que eso era sucio y lo dejaba de hacer.

En ese tiempo empezaba la era del internet y me iba introduciendo en la perversión, no estaba tan controlada la red y podías ver todo tipo de enlaces o de videos, pero a mi me gustaban los de manoseos y arrimones a colegialas en el transporte público, aquí en la CDMX. Pero poco a poco me incline por los de niñas menores de edad.

Regresando a la historia de que su mamá no dejaba qué se tocara o autoexplorara por que la regañaba, también me decía mi esposa a mi que si veía que hacia eso la regañara. Si, vi demasiada pornografia y sobre todo de niñas, pero era mi hija y tu mente no te permite dar el siguiente paso.

Pero una ocasión la termine de bañar y mi esposa no se encontraba en la casa y se llevo a mi otro hijo. Mi trato con ella bañandola o vistiendola me era normal, nada perverso, pero esa ocasión, le puse su bata de baño y la lleve a la sala, la pare en el sillón y la estaba secando, estaba completamente desnuda, me pidió un vaso con agua y le dije que en lo que iba por el vaso con agua se terminará de secar, cuando regresé, ella ya ...

... se había bajado del sillón secándose, así en el piso la puse frente a mi, le estaba secando su cabello y sin querer su vagina pego con mi rodilla, yo sentí un choque eléctrico, su vaginita sin ningún vello, cerrada y tierna estaba posandose en mi rodilla, yo no le dije nada, seguía secándole el cabello y ella empezó a hacer movimientos circulares con su cadera, no sabia como reaccionar pero deje qué siguiera en lo suyo. No duro mucho el qué le secara el cabello y cuando termine le dije listo Ana, pero siguio con su movimiento, yo me dejaba llevar sin decirle nada, hasta que le pregunte sin enojarme y lo más natural como papá e hija.

¿Que sientes hija?

Siento rico, cosquillas.

Pero tu mamá te regaña si lo haces.

Es que siento rico papá.

Era una platica normal pero cómplice los dos.

Su vagina frotaba mi rodilla pero yo no hacia más con ella más que observar.

¿Te gusta hija?

Si papi, se siente cosquillas.

Si te gusta, hazlo donde no te vea tu mamá, cuando vayas a hacer pipí tocate, acariciate.

Le estaba dando permiso de que masturbara a mi hija.

Termine la platica y corte diciéndole, deja te pongo te visto por que ya no tarda en venir mamá y te va a ver.

La termine de vestir y nos fuimos a ver la televisión.

Desde aquí fue el inicio de una lucha interior entre qué es mi hija y no me quería atrever a más con ella,

Así que decidí que otros la disfrutarán, pero eso sucedió tiempo después qué en otros relatos lo comentaré.