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Visita a la doctora
Fecha: 05/11/2025, Categorías: Fantasías Eróticas Autor: lceman, Fuente: CuentoRelatos
... brutal, la doctora con la mano libre y como si me ordeñase acabó de soltarme toda la leche mientras su mano todavía se movía dentro de mí. Tardé cosa de cinco minutos en recuperarme con la mano dentro de mi culo, cuando me relajé Wilson se separó de mí y ayudó a su jefa a sacar la mano, muy cuidadosamente la sacaron entre los dos, y cuando sus dedos atravesaron mi esfínter para dejarlo libre, mis intestinos notaron un vacío total, como si me faltara algo. Lentamente me incorporé y por primera vez vi la cara de la doctora Ibáñez desde que comenzamos la aventura, su melena seguía en el moño que llevaba muy elegante, pero su gesto era muy diferente, su sonrisa era muy pícara y ya no parecía tan sofisticada, su blusa había desaparecido y su falda también, su cuerpo estaba cubierto por un estupendo body-tanga y ligas de encaje negro, siquiera había notado cuando se desnudó, quitándose los guantes de látex se levantó de la silla y se acercó a mí todavía sentado en la camilla, intentando recuperar. Se puso entre mis piernas y me besó en los labios, su lengua recorrió mi boca entrelazándose con la mía, mis brazos la rodearon agarrándole sus buenas nalgas cuando noté la dura polla de Wilson apoyándose sobre mis manos y culo de su jefa, abrazó a la doctora por el pecho, bajó las copas del sujetador del body y pellizcó sus pezones entre los dos cuerpos. Entendí que la sesión no había acabado, estos dos querían su ración de sexo total y yo no pondría pegas a nada ya, había ...
... cruzado la frontera y estaba dispuesto a todo. Wilson se puso entre los dos y nos pidió que le comiéramos la polla de rodillas, nos abrazamos al escultural cuerpo de Wilson y fuimos bajando hasta la enormidad de Wilson besando cada uno de sus músculos, pectorales, abdominales hasta llegar a su negra polla, Laura agarró la polla por la base y me la acercó a la boca, en esta postura era mucho más fácil embadurnar de saliva ese aparato, Laura hubiera necesitado dos manos más para abarcar la longitud del miembro, su boca recorría un lado y yo el otro, nuestras bocas se unían en la punta donde nos alternábamos para introducirla dentro de nuestras bocas. Las manos de Wilson sujetaban nuestras cabezas, Laura, fue bajando por los testículos de Wilson y este abrió las piernas y ella se deslizó hasta su ano, con la lengua hacia arriba le dio un beso negro de órdago, Wilson se movía al son de los lengüetazos que le suministrábamos a la vez en el culo y en la polla. Laura se incorporó y me dijo si quería follarme a Wilson, a su negro como lo llamó, la verdad es que no me lo había planteado pero después de haberle comido la polla es que no me importó, hizo que Wilson se tumbara bocarriba en un pequeño sofá que tenía en la consulta, levantó sus enormes piernas y sujetándolas por las rodillas me ofreció su ya de por si negro agujero, Laura se acercó con un condón se lo metió en la boca y se agacho hacia mi polla, muy hábilmente me lo coloco sin tocarlo con los dedos. Laura era ...