El chantaje II: Un paso a lo prohibido
Fecha: 05/05/2018,
Categorías:
Incesto
Hetero
Autor: TKBDDOS, Fuente: CuentoRelatos
... suspiro al sentir la calidez de mi boca, cerró los ojos y se recostó en la cama, me tomo de la cabeza empezando a jalar de mí para que entrara más su rabo, yo lo deje que hiciera lo que quería, su verga empezó a entrar más y más, hasta que sentí unas arcadas porque ya la tenía en la garganta, el después jalo mi cabeza hacia fuera, después hacia dentro y viceversa todo el tiempo. Sentía como la cabeza de su verga chocaba contra mi garganta, su calidez, su fuerza, su dureza. Mi hermano ya entonaba sus alaridos de placer Así, Valery, así, que rico lo mamas, que rico. Sigue hermanita trágatela toda. No pares. Sigue así, sigueeeeeee. Yo no le contestaba porque todo el tiempo tuve la boca llena de su verga; sus movimientos cada vez eran más fuertes y rápidos mi boca se acostumbraba cada vez a ese pedazo de carne y entraba cada vez más y más, hasta el punto de que toda la verga la tenía dentro y mi barbilla chocaba contra sus bolas, yo para eso ya tenía las manos en las rodillas para apoyarme y que el hiciera todo lo que le pareciera bien. Algunos líquidos pre seminales ya escurrían por mi barbilla, y otros me los tragaba cada vez que podía, después de un buen rato de estarme cogiéndome la boca, comenzó a echar todo su semen dentro de mi boca obligándome a tragarme parte de su leche ya que antes de que terminara me la saco y derramo un poco de semen en mi cara, un chorro me callo desde la boca hasta la frente, otro me tapo uno ojo y otro más en la barbilla. Su último esfuerzo ...
... hizo un hilo de semen desde mis labios hasta la punta de su verga, lo cual yo jale con mi lengua y me lo trague; Antonio con su dedo recoge toda la leche que quedo esparcida por mi cara y me la lleva a la boca, el seguía jadeando. Después con mi lengua comienzo a limpiarle la verga con lametones y chupadas, ya comenzaba a tener cierta flacidez por lo cual se la guarde en el short. Se puso de pie tomándome de la cintura me aprisiono a él y comenzó a besarme, en cada beso podía sentir la lujuria de mi hermano, mordía mis labios, recorría beso a beso mi cuello y yo tan solo dejaba sentir aquel placer que ya invadía mi privacidad. Solo me miro y con un último beso me dejaba para irse a su habitación, me recosté y solo pensaba en aquel momento en el que accedí a seguir con esta situación, no sabía cuál sería mi destino, mas sin embargo la excitación, la morbosidad, la lujuria invadían mi cuerpo dejándome a plena disposición a las aberraciones de mi hermano, no sé qué hora era, lo único que recuerdo es que mis ojos comenzaron a cerrarse y la lluvia aún continuaba sin cesar. Poca luz atravesaba las cortinas de mi habitación si bien ya era de día pareciera estar nublado, un tanto adormitada me dirigí a mi ventana recorrí un poco la cortina observando como aquella lluvia permanecía, sentí un poco de frio, fui al armario y saque un conjunto de pants rosa, me apure arreglar la habitación, me dirigí a la cocina para prepararme un poco de café, encontrándome una nota que decía “desayunen ...