1. Entregando a Lorena 40


    Fecha: 20/05/2018, Categorías: Anal Sexo con Maduras Voyerismo Autor: aristurman, Fuente: xHamster

    Mi amigo Julio se había divorciado recientemente y una noche Lorena me sugirió que lo invitáramos a cenar a casa; diciéndome que ella se lo había cruzado por la calle y lo había visto muy deprimido y amargado.Después de una exquisita cena regada con buenos vinos, nos sentamos los tres a conversar en los sillones; para ver si entre Lorena y yo podíamos levantarle un poco el ánimo.Hablando de todo un poco, Julio terminó confesando que, una de las cosas que peor llevaba era la abstinencia; ya que con su ex mujer, él siempre había hecho de todo en materia sexual, incluso intercambio y tríos.Lorena intentó discutir con él, diciendo que nosotros nunca habíamos sentido esa necesidad, ya que nos llevábamos muy bien sexualmente…Pero Julio insistió, diciendo que eso debería ser algo normal y habitual.Finalmente terminó preguntándome, qué me parecería si se le antojara en ese momento pedirle a mi esposa que le hiciera una paja en mi presencia.Ella puso cara de sorprendida, pero yo sabía que eso la estaba empezando a excitar. Seguramente ya se estaba humedeciendo, ya que siempre me había dado indicios de que se sentía atraída por Julio.Sería solamente una paja; algo casi mecánico… susurró Julio y se fue al jardín a fumar un cigarrillo, dejándonos solos a Lorena y a mí para que pensáramos su propuesta…Ella me miró diciendo que no quería darle la razón a mi amigo y que una paja era realmente nada, comparándolo con un polvo…Eso confirmaba mis sospechas. Lorena estaba caliente con Julio y ...
    ... ahora se le daba la oportunidad de hacer algo con él, aunque no fuera más que una paja. Yo estaba seguro que masturbar a otro hombre en mi presencia le provocaría una buena excitación a mi calenturienta mujercita.Ella dijo entonces que no se desnudaría ni se dejaría tocar por mi amigo. Solamente era una paja, con las manos, nada más que eso…Mi esposa se acercó y me acarició la verga por encima de los pantalones. Sonrió al notar que ya estaba bastante dura. Me prometió que solamente lo tocaría de manera mecánica y que no lo desearía para nada…Hice que se arrodillara frente a mí. Saqué mi verga de su encierro y ella se la metió en su delicada boca. Ver sus labios rojos alrededor de mi pija endurecida me excitó sobremanera y pronto acabé dentro de su boca.Ella se levantó para ir al baño y yo me dirigí al jardín, a llamar a Julio.Cuando le dije que aceptábamos puso cara de no poder creerlo. Me siguió adentro de la casa, mientras escuchaba mis condiciones: él no tocaría a mi mujer, sacaría su verga al principio y la guardaría al final…Lorena había atenuado un poco las luces y le indicó a Julio que se sentara en uno de los sillones. Ella se sentó a su lado y le ordenó que la sacara.Mi amigo obedeció y pronto su verga estaba expuesta a nuestra vista. No era excesivamente grande, pero tenía un tamaño más que aceptable.Mi mujercita acercó su mano derecha y la tomó entre sus dedos. Empezó a meneársela un poco con toda la mano, sobándosela bien para que se le pusiera más dura todavía, lo ...
«123»