1. La primera vez, con adulto...casado!


    Fecha: 22/05/2018, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    En aquellos días tenía unos 9 o 10 años, pero sabía ya bastante del sexo, pues desde temprana edad un jovencito vecino me comenzó a manosear y a que yo lo tocara a él. Desde que tengo uso de razón sabía lo que deseaba y gustaba, así que nadie abusó de mi, dejándolo claro. Mi vida continuó al mudarse mi amigo y sus hermanos que también me cogieron. De ahí comenzé a coquetear y a estar con amigos de mis hermanos, que me gustaban, chicos aproximadamente 15 a 20 años. Pero nunca con un hombre mayor de edad y casado. Muchos hombres casados y maduros, me hacían insinuaciones e invitaciones a estar con ellos, pero siempre los rechazé porque no me atraían y si me gustaba tal tipo, entonces ese no me hacía caso a mi, pues había vecinos casados que estaban buenísimos. Otras veces cuando se iba a dar la gozadera, llegaba alguien o me llamaban en casa y no se podía hacer nada. Ahora le contaré mi relato, muy verídico por suerte. Cerca de mi casa vivía un matrimonio sin hijos, de edad promedio como de 40 años o más. Ambos les gustaba beber mucho alcohol y peleaban mucho. Recuerdo que él tenía una vaca y la llevaba a pastar a una vega cerca del río, que había dónde me crié. Me gustaba verlo y conversar con él, a quién llamaré Pedro. Era bien alto, blanco de un pelo canoso, y muy guapo. Su rostro era precioso. Se que muchas veces nos seguía con la vista, cuando nos sorprendía a un amigo y a mi saliendo de la maleza o escondiendonos en ella, para dar rienda a nuestros deseos sexuales. ...
    ... Pienso que Pedro sabía, lo que yo hacía con ellos y su mirada me lo decía. Ese hombre me comenzó a llamar la atención. Un día su esposa Tana, llegó con bolsas del mercado y yo me brindé a ayudarla, a llevarlas a su casa. Cúal fue mi sorpresa al yo entrar con las bolsas, a casa de Pedro y Tana, mientras Tana de quedó atrás hablando con una vecina. Pedro estaba completamente desnudo, en la cocina! En aquellos días había seguridad en los vecindarios y las puestas de las casas, no se cerraban. Me quedé perplejo mirándolo, nunca había visto a un hombre adulto desnudo! Pedro tenía un cuerpo perfecto, vientre plano, por su trabajo fuerte, pecho ancho y semi peludo...pero lo que no dejaba de ver, era su enorme verga, que aun flácida, era enorme y su cabeza sobresalía! Pedro se dió cuenta de mi turbación, y me preguntó si ya Tana venía por ahí, le dije gagueando por mi nerviosidad, que las bolsas eran de ellas y que yo la estaba ayudando. Y sin esperar salí disparado de allí. Tana seguía hablando con la vecina y me dió unas monedas por ayudarla. Me fui a casa y eso que vi, no se me quitaba de la mente, cada vez que lo recordaba, mi penecito se me paraba, y me arrepentía de no haberme quedado allí, para ver si me dejaba tocarle aquella enorme verga. Al otro día cuando de llegué de mi escuela, me bañé y cambié de ropa. Me fui al río y allí estaba Pedro, me saludo y me dijo que Tana iba a salir, que la vigilara cuando se subiera al taxi y que entonces fuera a su casa, que me iba a enseñar ...
«123»