Mari Carmen, una madre muy ardiente 5
Fecha: 23/05/2018,
Categorías:
Incesto
Autor: hagen2012, Fuente: SexoSinTabues
... que Pablo comprende muy bien. Pili sabe que algo ocurre entre los dos, pero su reciente chasco hace que sus sospechas sean pronto apartadas por su mente racional. -Adiós, entonces- murmura el chico, abandonando la estancia. Un instante después, se oye el portazo de su alcoba. Madre e hija se quedan solas en la cocina, con solo el canto de los pájaros de afuera por compañía. Mari Carmen, la jugosa cuarentona, mira de reojo a su hija. Pili está realmente exuberante, con aquella camiseta que realza su desnudez muy poco cubierta. La madre siente un ramalazo de deseo, que se apresura a apagar, sin conseguirlo del todo. Sus ojos observan a escondidas la redondez y firmeza de las nalgas de su hija, y sus tetas, igualmente firmes y atrayentes. Pero siente algo más. En realidad, se siente algo molesta por la sugerente vestimenta de su hija, sin reparar en que ella misma está, también, casi desnuda. -Pili- le dice, a baja voz- Creo que no has debido bajar a comer con tan poca ropa encima. Ten en cuenta que está tu hermano. Y después de decir esto, Mari Carmen sigue fregando la loza, como si tal cosa, aunque está atenta a la respuesta de su hija. Pili, por su parte, se siente anonadada. ¿Su madre, que prácticamente está desnuda, se atreve a recriminarle a ella su mínima camiseta? Eso si que no. -¡Mamá!- contesta Pili, airada-¿Te parece mal? ¿Te parece mal que yo ande por casa con tan poca ropa? ¡Esta si que es buena! -¡Pili!- exclama Mari Carmen, que no esperaba que su sumisa hija ...
... reaccionara tan indignada-¡No me hables así!¡Soy tu madre! -Si, mi madre. Una madre que camina por la casa enseñándolo todo, o casi, y que ahora se queja de que yo lo hago. - Pili está enrojecida de vergüenza y también de ira. Poco a poco se acerca a su madre, que se ha vuelto hacia ella con los ojos encendidos. -¿Qué yo voy por ahí enseñándolo todo?¡Tú estás loca!- contesta Mari Carmen, alzando un poco la voz, aunque siempre es consciente de que Pablo está en el piso superior y por nada del mundo querría verlo bajar en estos momentos. -¡Mamá, pero si estás casi desnuda! Tienes las piernas al aire, las …tetas, casi al aire también y, con que te inclines un poco…¡todos podemos verte el culo!¡No llevas ropa interior, estás desnuda bajo ese…traje de pacotilla! Madre e hija están casi pegadas la una a la otra. Mari Carmen se siente herida por las palabras de su hija, que sabe que son reales. Mientras intenta encontrar una respuesta adecuada, no hace sino fijarse en los labios de Pili, unos labios que conforman una boca muy apetecible. -Yo…Pili…yo…no quería…que…en fin…no me gusta que me vean el…culo…es solo que este traje es tan corto y yo…yo…- Mari Carmen balbucea. Está excitada desde que terminó de hacerle la mamada a Pablo. La masturbación anterior no ha servido para nada. Ahora está tan o más cachonda que antes. Y Pili, casi sin ropa, está frente a ella. Con aquella boca tan bonita. -Lo siento, mamá- dice Pili, que también está muy excitada, sobre todo desde su encuentro con Pablo ...