1. Infidelidad en un concierto de rock


    Fecha: 26/05/2018, Categorías: Sexo Duro Sexo en Grupo Tabú Autor: MrJosh93, Fuente: xHamster

    ... tan suave....Yo cerraba los ojos y aquella sensación me tenía confundida,parecía todo un sueño, pero era real, demasiado real como para poderlo evitar.Cesar, por favor, vámonos - le supliqué de nuevo a mi novio.Espera un poco, media hora y nos vamos ¿vale?Es que tengo mucho calor....No me hacía caso, estaba destinada a caer en las manos deaquellos desconocidos sin desearlo ¿o realmente lo deseaba?- ¿Tienes calor preciosa? - me decía el tío - Yo voy a apagarese fuego, verás...Esta vez sus manos se metieron por la cara interna de mismuslos y comenzó a subir su mano, notaba su calor y su sudorosa mano ascendiendocentímetro a centímetro en mi piel. De pronto noté como uno de sus dedos llegó ami sexo. Se detuvo, acarició mis ingles lentamente, hasta que su dedo acariciómi húmeda rajita pudiendo captar mi calor. Volvió a mi oído y me dió un pequeñomordisco en el lóbulo de la oreja mientras me susurraba:- Vaya.... estas caliente, bien caliente y mojada, verás quebien te entra mi dedo....Se volvió a sus amigos:- Esta zorrita esta que se funde....Su dedo siguió jugando con mis ingles, con mis pelitos y depronto se introdujo en mi vagina sin apenas dificultad, debía ser su dedocorazón, muy largo por cierto.Fue inevitable que yo soltara un nuevo suspiro y un gemidocasi inaudible.El vestido se me pegaba por el sudor y con su mano libreseguía palpando mi culo, mi cintura y a continuación volver a restregar susdedazos entre mis tetas. Yo miraba de reojo a Cesar pero no se daba cuenta ...
    ... denada, pobrecillo... me estaban metiendo mano de lo lindo y él mirando al tendidocomo si nada.El habilidoso dedo de aquel desconocido se introducía una yotra vez en mi coñito, proporcionándome un gusto tremendo.- Vaya coñito tan estrecho, que rico, que rico... -me repetíauna y otra vez al oído.El tío dejó de tocarme de repente, por un momento creía quetodo había terminado, pero no era así, estaba hablando con sus amigos ypreparando alguna otra estratagema. Efectivamente, hizo colocar a sus amigostapando a Cesar para asegurarse de que no veía nada, además como la gentebailaba y saltaba, tropezábamos una y otra vez y aquello parecía formar partedel tumulto de gente.El chaval volvió al ataque pero esta vez no era su mano laque estaba entre mis muslos, era su aliento el que notaba en mi culo, alprincipio cerré las piernas, pensaba que aquello había ido demasiado lejos yquería detenerlo, al menos en parte, ya que cuando su lengua rozó mis glúteoscreí morirme, pero más aún cuando con sus manos separaba mi culo y esa mismalengua exploraba mi agujerito posterior, entonces si que había perdidototalmente los papeles, estaba totalmente entregada. En un abrir y cerrar deojos aquel chico estaba bajo mis piernas chupándome lo más intimo de mi cuerpo,iba del culo a mi coño una y otra vez, cuando su lengua rozó mi clítoris, unpequeño grito se escapó de mi garganta, afortunadamente parecía sordo, pues enel griterío de la gente apenas nadie lo oyó y mucho menos Cesar que seguíaagarrado de mi mano ...
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