La dependienta me quiso chantajear (III) - Relatos Eróticos

La dependienta me quiso chantajear (III)

... sueño atrasado. A las seis no recibí nada, y como veía que pasaba las horas y no decían nada, pensé que no la había podido convencer, pero a eso de las ocho sonó mi móvil. -Belén.-Acepto Y a los diez minutos más o menos recibí otro de otro número -Mónica.-Ufffffffff, estoy ardiendo, no dejo de pensar en Ud., y sus sumisos, y si quiero seguir, por cierto siento el retraso, pero no hemos podido salir a descansar hasta ahora mismo, aunque le he ido hablando mientras trabajábamos. Al principio se ha descompuesto y me ha dicho, bueno les ha dicho de todo, y hasta ha pensado en denunciarles, pero cuando le he expuesto que es ella la que puede perder, porque tienen su firma y la grabación, y que si nos despedían se iba a enterar su novio y hasta su familia del motivo. Aunque la verdad Señor, no se si al final lo hará, también ha aceptado con la condición de que yo este presente, yo le he dicho que no, que yo ya había cumplido y que no quería volver, jajajajajajaja, y al final he cedido, pero diciéndole que me debe un favor muy grande. Ahora esta que no da pie con bola. Sabe Señor?, estoy deseando que la sometan, a ver si espabila y además si Ud., lo considera oportuno me gustaría comérmela, uhmmm, me han vuelto una viciosa, jajajajaja, pero es que esta buena. -Ok perra, a las once y cuarto donde ayer, tenéis coche? -Mónica.-No Señor, hemos venido en bus, porque en principio le he dicho que íbamos a salir, y le va a gustar como va. -Vamos a ir a su casa, así que si tiene que ...

... hablar con su novio para darle esquinazo que lo vaya haciendo -Mónica.-No hay problema el novio esta en Cádiz de despedida de soltero. -Ok perra, porque ahora eres MI perra, nos vemos a las once y cuarto donde ayer. -Mónica.-Besos MI AMO, uhmmm, como suena, me gusta. A las once y cuarto más o menos llegamos Raquel, falda blanca por encima de las rodillas blusa también blanca medias de rejilla negra y tacones negros de 12 cm., y allí estaban las dos aunque no se le veía bien lo que llevaban puesto, pues llevaban una gabardina larga, solo que Mónica llevaba las botas del día anterior, y Belén zapatos de tacón oscuro y de unos seis o siete centímetros. Aparco Raquel, y yo salí fuera del coche, Mónica me miraba con cara de picardía, pero Belén no levantaba la cabeza, aunque se le veía con los ojos llorosos. -Hola, quitaros los abrigos que os vea. Rápidamente Mónica se lo quito pero Belén aun dudaba. -Vamos perra, solo digo las cosas una vez, y si no pregúntale a tu amiga, y no me importa arruinarte la vida, ya que vosotras lo quisisteis hacer conmigo. -Belén.-Yo no fui, se lo ruego, nunca he hecho algo así. -Algo así?, aun no sabes que vamos hacer, pero lo vas hacer, tómatelo como una despedida de soltera, porque te usaremos solo una noche, mañana desapareceremos de tu vida, y solo nos veras cuando vayamos a comprar, así que quitate de una vez el puto abrigo y entra detrás. Cuando se lo quito, uffffff, me empalme nada más verla, minifalda, pero minifalda negra, pantys negros, y los ...