1. El profesor...


    Fecha: 12/06/2018, Categorías: Gays Autor: renovatio111, Fuente: xHamster

    ... había tenido un múltiple orgasmo.Él apresurando sus movimientos tuvo una corrida increíble, llenando sus huevos, su vientre y su peludo pecho de su blanca leche de macho.Se quedó exhausto con los brazos detrás de su nuca y con una amplia sonrisa en su rostro, respirando agitadamente, y luego embarrando su leche con la mano, la esparció en todo su pecho.Me dijo que debía limpiarse y que regresaba en un momento, yo lo esperé igual de relajado sin creer todavía lo que acababan de ver mis ojos.Cuando regresó se había puesto su mismo short amarillo y ya limpio seguimos platicando de lo bien que la habíamos pasado y de que sería maravilloso hacerlo en la vida real y conocernos.Yo por supuesto pensando en que eso tenía un pequeño inconveniente ya que no era quien decía ser.En esos días seguíamos chateando y haciendo el cyber sexo de vez en cuando, y todas eran unas sesiones fantásticas, aunque debo confesar que lo que más me gustaba eran esas noches de sábado, cuando platicábamos trivialidades y cosas de la vida, haciéndonos preguntas indiscretas y riendo de chistes tontos sin sentido, nos estábamos convirtiendo en amigos muy cercanos y cómplices de sexo cibernético.Pero al pasar el tiempo comencé a sentir celos de mi propia versión femenina ya que lo que mas anhelaba no era platicar con él como “Gaby” sino como Gabriel.A estas alturas yo ya sabía demasiadas cosas íntimas de mi maduro profesor, sabía que le gustaba y que le disgustaba, cuales eran algunos de sus planes, sobre su ...
    ... familia y alumnos, amigos cercanos y demás y todo esto me parecía una información demasiada valiosa para ser desperdiciada en “Gaby” así que debía aprovecharla y comenzar a acercarme más como Gabriel a mi amado profesor de Física.También me di cuenta que yo era bastante honesto en mis gustos y aficiones con él, mis conversaciones eran abiertas y sinceras, y por un momento me hizo sentir que en realidad lo que más le gustaba de mí era lo que pensaba y no tanto mi cuerpo ficticio.Por esas fechas cuando salíamos a hacer deporte en bicicleta los sábados por la mañana, y me contaba de “Gaby” mi corazón se debatía entre la tristeza y la alegría, porque el hombre que más deseaba en el planeta estaba al mismo tiempo cerca y a millones de kilómetros de distancia.Esa era mi triste realidad, no me atrevía a confesarle mi osadía que yo en realidad era esa “mujer” de la que se estaba enamorando y compartía sus secretos y fantasías y me conformé a sentirlo mío por las noches a través de un monitor de computadora.Una noche como cualquiera y después de tener sexo cibernético de nuevo, Sergio me pidió que necesitaba conocerme y que el viernes entrante había una reunión con sus compañeros de trabajo y alumnos y que le encantaría que lo acompañara.Yo inventando mil pretextos para no ir, me disculpé y él un poco triste me dijo que era una pena y que ojalá muy pronto pudiéramos conocernos.Esa semana noté en las clases, que mi amado profesor se encontraba algo cabizbajo y adiviné enseguida que era ...
«12...567...31»