Confesiones
Fecha: 21/06/2018,
Categorías:
Hetero
Autor: Janvino3, Fuente: SexoSinTabues
Me llamo Ana....y como mucha gente de mi generación, me case muy joven… con mi primer novio. Mi poco experiencia y mi timidez, me llevaron a encerrarme en mi misma y a llegar tener complejos tan absurdos que me hacían infravalorarme. El paso del tiempo y la atención de mi marido me ayudaron a convertir lo que yo veía como defectos, en virtudes y poder disfrutar plenamente de mi cuerpo y mi mente. Y cuando creía que mis fantasmas habían desaparecido, mi marido me sugiere entrar en un juego, que podía ser peligroso...el de los tríos. Poco a poco mi marido me fue enseñando páginas de temática sexual, donde habían parejas, chicos, chicas, con deseos parecidos a los suyos, como los intercambios de pareja, los tríos, gente que busca sexos, así, estaba claro que llevaba tiempo con esa idea en la cabeza; yo no me lo podía creer, aún no asimilaba que la cosa iba en serio, pero él con su labia y su arte de conquistar lograba todo de mi, como charlar con otras parejas, vernos en la cámara, compartir fotos, aunque me estuvieran muriendo de vergüenza. ...pero siempre accedía. ...así que ni modo... me dejaba llevar por él, pero nunca concretamos nada, si la cosa pasó de ese tonteo. Era domingo, hacía mucho calor, y ya habíamos follado dos veces… estábamos en la cama y me dice que le apetece hacer un trío, pero ahora en serio... yo no me lo podía creer…le dije que si era coña...y me dijo que, que le hacía ilusión, y que no quería hacerlo sin mí, que quería que yo fuera el centro, y verme ...
... gozar al máximo. A mí me vinieron tantas cosas a la cabeza... pero siempre había confiado en él, así que dije, sin dudarlo, que sí, claro, con mis condiciones, claro, y disparé directa a su ego, pensando que encontraría su no, rotundo, por respuesta… ¿Qué tal si quedamos con un chico? Bien, dijo que sí, me quedé paralizada, pensando… maldito cabrón, y ahora que le digo… pude reaccionar, y le dije, que entonces tenía que buscarme un chico que me gustara, que me tenía que dejar conocerlo primero, y en el caso que lo encontráramos, estaría dispuesta a hacerlo... Así que poco a poco fuimos entrando en las páginas… ya con las cosas más claras….y yo siempre era capaz de encontrar alguna pega, le decía, este no, este es borde… si encontré gente genial, pero la distancia lo hacía imposible… parecía que yo los escogía lejos, para retrasar aun más el encuentro, pero no era eso, era realmente que los que escogía, no podían, y así estuvimos meses, tonteando con muchos chicos ...hasta que un día. .me hizo una encerrona. .. Invitó a un amigo en común, Felipe, bisexual... yo no sospeche nada porque él trabajaba conmigo y siempre estábamos juntos incluso se había quedado a dormir en casa, alguna noche que la cena se había alargado más de la cuenta. Mi marido había organizado una comida en casa, en la barbacoa como muchas otras veces...y al final terminamos un poquito tomados, como muchas otras veces....y como siempre, comimos y nos pusimos a bailar, los tres sueltos claro, y de repente ponen ...