LA RUSA ME PROVOCO MI PRIMER SQIRT
Fecha: 22/06/2018,
Categorías:
Lesbianas
Autor: mimadaa, Fuente: SexoSinTabues
En mi viaje a India aquella Rusa me Hizo sentir lo que nadie Hacía apenas un par de días que había llegado a India, estaba padeciendo fuertemente del dichoso “jet lag” la famosa descompensación que te da al viajar a través de diferentes zonas horarias, pues teníamos ni más ni menos que 13 horas de diferencia con México. De verdad me sentía mal, así también mi amiga y socia con quien viaje, ella decidió quedarse a dormir en la casa de huéspedes del ashram en que nos internamos en Pune, en realidad ni decidió, ni siquiera pudo recobrar el sentido, estaba sumergida en un sueño profundo, mientras yo bastante aletargada salí de la habitación. Nos hospedábamos en el tercer piso, así que, aunque normalmente me gusta hacerlo, esta vez no pretendía bajar así las escaleras. Tarde en encontrar el elevador entre los laberintos pasillos, por fin apareció frente a mí y mejor aún, abriéndose. Recuerdo que 4 tipos con túnica larga y una chica estaban adentro, yo titubee porque veía el espacio lleno, hasta que uno de ellos, el más alto y debo decir con un cuerpo atlético maravilloso y unos ojos azules para perderse en ellos, me dijo – “Come on cute” – obviamente no pude más que subir ante aquel ánimo. El elevador tardaba un poco en cerrar y mientras yo pretendía tomar un sitio, pero era tan pequeño que donde me pusiera, un hombre me quedaba atrás. Ellos comenzaron a reírse de forma descarada, la chica, Irina supe que se llamaba porque así le gritaron cuando todos avanzaban y ella caminaba ...
... lentamente volteándome ver. Vapul el recepcionista de la casa de huéspedes me preguntaba en inglés si los rusos me habían incomodado, le dije que no, que todo bien. Pero bueno, por lo menos ya supe que son rusos. Entré a la meditación nocturna, en los aposentos del maestro, pero siendo honesta el sueño estaba acabando conmigo y con muchísima pena me levante y salí, comencé a caminar por los pasillos, era tan grande el lugar que me perdí, de hecho la meditación terminó 5 minutos después lo supe porque vi pasar algunos compañeros. Mejor aún, seguí mi camino entre los árboles para poder por finir a tirarme a mi habitación. - No puede ser – dije mientras vi abrirse en elevador –que suerte la mía – otra vez los rusos subiendo a su habitación, pero tenían oprimido el piso tres el mismo al que yo iba y según lo que había visto, ellos venían de algún piso más arriba. Otra vez las sonrisas burlonas y hasta un tanto enfermizas se dibujaron en sus caras, hasta en la de ella, éramos tantos que como he dicho antes, para donde me acomodara uno me quedaba de espaldas, esta vez fue Alek, el más alto, el atlético, el líder natural de ese grupito. Por fin llegamos al piso tres, yo avancé hacia mi habitación y los vi venir de forma muy normal caminando detrás de mí, sin ninguna prisa, yo avancé y abrí la habitación y de pronto los vi parados de nuevo detrás, pensé quizás que me estaba equivocando, riéndose como estúpidos lujuriosos pero eso era muy común en aquel ashram, se dice que por el trabajo ...