Un nuevo vecino en el barrio (6) - Relatos Eróticos

Un nuevo vecino en el barrio (6)

Me puse el vestido y quedé a la espera de órdenes… -Qué lindo se te ve con ese uniforme de sierva, Jorgito… -Gracias, señor Genaro… -¿Qué sentís vestido así, Jorgito?... -Me… me siento, no sé… raro… -Pero ¿bien o mal?... -Yo… yo soy varón, soy putito pero soy un varón y no… no quisiera ser una chica, pero… pero me excita estar con este vestido… -¡Muy bien, Jorgito! ¡Muy bien!... Te da morbo estar con ese vestido… -S… sí… Sí, señor Genaro…Es eso, me da morbo… -¿Sabés por qué? Porque sos un nene muy putito… ¡Muuuy putito!... Y me encanta que lo seas, pero yo quiero que seas todavía más putito… Quiero que seas un putito mucho más putito que el más putito de todos los putitos… -Ay, señor… -dije y sentí que mis mejillas ardían de vergüenza y ganas… -Hasta ahora venís tragando dos vergas, la mía y la de Abelardo… Pero quiero que tragues muchas más… -¡¿Qué quiere decir, señor Genaro?!... -Te cuento, Jorgito… Descubrí en Internet una maravillosa página, una página de contactos gay, con fotos… Le voy a proponer a Abelardo que publiquemos ahí un aviso sobre vos, un nene putito de tiernos dieciocho añitos que se ofrece a señores activos mayores de sesenta… Al escuchar semejante idea el corazón empezó a latirme rápido y fuerte… -Ay, señor, me… me gusta la idea… -Bueno, ahora a trabajar, sirvientita, y si trabajás bien después te doy verga… Por supuesto que me ocupé de hacer bien mi tarea, estimulado por saber que mi premio sería una buena ración de verga… Barrí, lavé vajilla, limpié el ...

... baño, le pasé lustre a los muebles y por fin quedé a la espera de mi premio… El señor Genaro inspeccionó todo y me dijo: -Muy bien, Jorgito, sos muy buena sirvienta… -Ay, gracias, señor… -Y sos muy buena putita también… ¿Y qué se hace con las putitas?... -N… no sé, señor… Dígame… -Se les da verga, Jorgito… Se les da verga por la boca y por el culo y eso es lo que voy a hacer con vos… -Sí, señor, haga… haga lo que quiera conmigo… -dije con esfuerzo porque era tal la calentura que me costaba respirar… -Claro que voy a hacer lo que quiera, nena puta… -¡Ay, cómo me calentó que me dijera nena puta! Y así de caliente vi que se bajaba el pantalón y el calzoncillo… -Arrodillate, putito, quiero una buena mamada… -Sí, señor, sí… -y me arrodillé para gozar de eso que me gusta tanto… ¡chupar una buena verga!... La pija estaba en reposo, pero empezó a despertarse cuando la agarré con una mano y con la otra los huevos… Empecé por besar y lamer los huevos… Tienen buen sabor los huevos y la verga del señor Genaro… Estuve un ratito lamiéndole y besándole los huevos y la verga, hasta que la noté parada y dura mientras él gemía y me tenía agarrado del pelo… Me la metí en la boca y empecé a chuparla en estado de éxtasis y muy, muuuy caliente a la espera de ese momento de gloria en que la pija suelta chorros de semen… Por fin ese momento llegó… Sentí mi boca de putito inundada de leche y la tragué toda mientras sentía que no hay sabor comparable al del semen… ¡Es un licor delicioso!... El señor ...