Entre libros y el silencio - Relatos Eróticos

Entre libros y el silencio

- Shhhh... tienes que estar callado, estamos en una biblioteca -. Takeru murmuró al oído de su amante con una caricia totalmente envenenada - Seguro que no te gustaria que nuestros compañeros y sobre todo Ken e Hikari nos vieran aquí disfrutando mientras ellos atienden en clase ¿no es verdad? -. Volvió a decir Daisuke apretó los dientes, todavía un poco aturdido en el lugar forzado donde Takeru le habia puesto, su cuerpo y cabeza descansaban en una mesa antigua de madera, Las cuerdas le mordieron la piel mientras flexionaba ligeramente sus hombros puestos hacia atrás. La piel de sus muslos estaba pellizcada y sus tobillos estaban atados. - Takeru... -. Para... -. siseó Daisuke enfadado cuando sintió que un dedo dentro de él le provocaba dolores más que placenteros. Odiaba y al mismo tiempo le ardía la piel que Takeru jugara estos juegos. Odiaba y amaba que su cuerpo respondiera, ente otras cosas porque solo con él sentía esa especie de dolor placentero, respondia al dolor agudo que su amante le ofrecía. - Te estás poniendo cachondo, eres un puto exhibicionista!! mira, mira como tu trasero chupa mi dedo, está mas desesperado que tú -. Takeru se rió en voz alta - Me averguenzo de tener esas reacciones, contigo no quiero ni siquiera una puta erección de mierda, para!! .- Daisuke se movía muy enfadado culpandose a si mismo de tener un cuerpo tan sensible -Qué culpa tengo yo de que tu culo prefiera el tacto de mis manos fuertes que las de tu novio?? a todo nos acostumbramos con el ...

... paso del tiempo - Dijo Takeru mientras añadía otro dedo. El culo de Daisuke se estaba estirando lentamente e inconscientemente a las atenciones de su amante. Takeru amaba que Daisuke odiase que su cuerpo estuviera tan obviamente bajo el control de él - Funcionó, pero ahora tienes que ser castigado. Ya que vas a ser ser compartido - ey!! !!Takeru!! - Oh mira Daisuke, ahí los tienes Daisuke sacudió la cabeza lo más posible, conmocionado y enrojeciendo de humillación al ver a siete personas mayores que él en la puerta de la librería, conocía solamente a dos, los otros eran desconocidos Yamato empezó a hablar, sacando su polla y comenzando a acariciarla. - Hermanito ¿Todo el mundo pagó?-. Takeru preguntó guiñando un ojo mientras añadía un tercer dedo y retorcía sus dedos dentro de ese delicioso culo. - Sí. Todo el mundo ha pagado por este espectaculo, todos se han ido, hemos cerrado las puertas-. Yamato tiró una pila de billetes sobre la mesa y Daisuke empezó a jadear, aterrado y humillado. Yamato le dio una sonrisa a Daisuke y levantó la llave - Tenemos la biblioteca para nosotros hasta mañana por la mañana. - Esto está yendo demasiado lejos... DEJARME EN PAZ -. Daisuke jadeó, su cuerpo se puso rojo mientras luchaba contra las cuerdas. - Tu culo es mejor que cualquier coño. ¿Quién quiere follarle primero? -. Contestó Takeru ignorando la voz henchida de pánico de Daisuke -Yo, me hace ilusión-. Dijo de nuevo Yamato sonriendo mientras caminaba. Su polla no era casi tan grande como ...