Beatriz (I)
Fecha: 27/06/2018,
Categorías:
Hetero
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... por medio. Así fue que una tarde lo fui a buscar a su consultorio, era tan antiguo que usaba guardapolvo, se lo quitó y me abrazó, empezamos a besarnos con toda la pasión posible, las caricias se hicieron más audaces, yo ni loca me iba a atrever a tocarle la pija, pero lo apretaba para sentirla bien parada contra mi vientre, se animó a quitarme el saco y tocarme las tetas por arriba de mi blusa, luego empezó a desprender botones y meter la mano dentro de mi corpiño, sabía que ya lo tenía. Yo llevaba bastante tiempo sin coger, y mi concha estaba totalmente mojada, pero no me atrevía a acelerar las cosas, lo dejé hacer a su ritmo, me sacó la blusa y me desprendió el corpiño hasta quitarlo, pensé que se iba a desilusionar con mis tetas chicas, blandas y caídas de tanto amamantar, pero no, me las empezó a chupar como si fueran las mejores. Buscó con paciencia los botones y cierres de mi pollera, encontró y abrió hasta que la prenda cayó al suelo, quedé con zapatos, panty y bombacha. Aquí volvieron mis dudas, usaba medias especiales para sostener las carnes que pugnaban por caerse, estas medias hacían que mi culo, grande, apareciera más formado y apetecible de lo que en realidad era. Temía que al sacármelas Leandro no ...
... me deseara más. ¡Qué poco sabía de los hombres!, un tipo maduro, enamorado y caliente, sólo quiere tocar carne y encontrar el agujero de su placer. Así lo hizo Leandro, a su modo, me desvistió entera, me acarició suavemente, luego se desvistió él y me llevó a la camilla del consultorio. Paso a paso me estimuló, me hizo acabar dos veces a mano, después metió su verga en mi concha que ya clamaba por esa barra de carne dura y masculina, una pija bastante normal en cuanto a dimensiones, pero yo la necesitaba con un hombre encima, me sentí llena de lo que quería, tuve dos orgasmos más, cosa desconocida para mí, acabar cuatro veces no me había pasado nunca con mi ex marido. De mis relaciones sexuales con mi ex les voy a contar en otra oportunidad, no porque hayan sido muy placenteras, sino para prevenir a algunas mujeres y que no les suceda lo que me pasó a mí Luego cogimos tres o cuatro veces más con Leandro, esta vez en telos, todo parecido a la primera vez. En la última me animé a chuparle la pija, creo que no le gustó mucho porque no quiso acabarme en la boca, tampoco se atrevió a chuparme la concha. Era muy bueno Leandro, pero yo necesitaba más. Y lo iba a tener. De cómo lo tuve se tratarán mis relatos siguientes.