1. Soy su tío


    Fecha: 30/06/2018, Categorías: Gays Autor: pacholi, Fuente: xHamster

    ... era la misma. Dejé que el niño recupere un poco de energía mientras lo alzaba y sin mediar palabra alguna emprendimos el camino de regreso.La culpa me carcomía, no podía dejar de pesar en que mi sobrino le pudiera contar a mi hermano. Pero además era mi sobrino, el hijo de mi hermano, tan solo un niño de 14 años y apenas si se había desarrollado, de 1,60m con su cuerpito delgado y sin pelo alguno contrastaba con el mío, un gigante oso de casi 1,90m muy corpulento, panzón y velludo. Él me había provocado, pero el culpable era yo sin dudarlo, esta vez ser el potente macho vergón que nunca falla, me había jugado en contra y las pruebas estaban en ese pequeño ano desflorado.Esa noche casi no pude pegar un ojo, pero por la mañana siguiente, estábamos desayunando ya solos.- Che, Carlitos.- llamé su atención.- Si tío.- Con respecto a lo que pasó ayer en la playa, no me gustaría que se enteren tus padres. Creo que está mal lo que hicimos, me siento muy avergonzado y además culpable.- le dije.- No te preocupes tío, yo no voy a decir nada. El que te provocó fui yo.- Pero eres menor de edad y no está bien.- agregué.- Tío, a pesar de tener 14años, yo ya sé lo que ...
    ... me gusta y soy responsable de eso, así como soy responsable de las cosas que digo. Además a mi me gustó mucho y creo que a vos también.- me dijo poniéndose serio.- Me alegra escuchar eso Carlitos, también lo disfruté mucho, pero no dejo de ser el responsable. Ya habías estado con alguien?- le pregunté.- Jajaja. Sí, pero solo pajas cruzadas con algunos amigos, nada más.- dijo un poco nervioso entre risas.- Yo también, pero nunca con alguien tan joven y menos en la playa.- le comenté.- Y yo nunca había visto una verga tan grande, va en realidad la sentí, no la vi. La puedo ver?- me preguntó con una sonrisa pícara.- Te quedaste con ganas veo. Y bueno, total… ya la tengo parada.- le respondí manoteándome el bulto para que él lo viera.Pelé mi verga y él se agachó observándola con detalle. Luego la tomó con sus manos rodeándola, como reconociendo sus dimensiones.- Tío Jorge, es realmente enorme, increíblemente gruesa y muy bella.- me dijo.Luego le pasó la lengua como si fuera un helado y después comenzó a mamarla.Esa mañana Carlitos fue otra vez mío y varias veces más durante el resto del día, así como el resto de los días de mi estadía en casa de mi hermano. 
«123»