mi feminizacion
Fecha: 30/06/2018,
Categorías:
Transexuales
Autor: karlaguadalupe, Fuente: xHamster
... desde entonces comparto una amistad muy enriquecedora, sobre todo en el plano sexual. ¡Qué hermosas esas reuniones de mujeres, todas viciosas del sexo como yo, en que las conversaciones en torno de nuestras relaciones amorosas con nuestros machos ocupan el centro de la charla! Allí intercambiamos experiencias, incrementando nuestro caudal de recursos personales para enriquecer aún más nuestra ya rica vida sexual y, sobre todo, provocarles gratas sorpresas a nuestros machos, razón última de nuestras vidas. Consejitos, pequeños secretos para prolongar e incrementar el placer sexual tanto propio como de nuestra pareja, poco a poco nos íbamos convirtiendo en maestras en el arte del amor.Hasta que una vez surgió del grupo una idea que recibió una grata acogida por parte de nuestros machos: realizar un encuentro de parejas para celebrar una fiesta sexual. Por mi parte, debo reconocer que fue hermoso conocer otras porongas, otros tamaños, otras formas, otras formas de moverse, de gozar, en fin, qué delicia sentirme tan puta. La experiencia fue tan deliciosa para ...
... todxs que decidimos repetirla con cierta frecuencia, agregándole cada vez nuevos ingredientes para mantener bien alto el interés. Recuerdo uno de esos encuentros en particular, cuando decidimos entre todxs jugar a que las mujeres éramos pupilas de un prostíbulo que recibíamos a nuestros machos como si fueran clientes del mismo. De ese modo, todas reunidas en el living de la casa vestidas a la usanza de las prostitutas de un burdel, hacíamos pasar a los machos-clientes quienes elegían de entre nosotras aquélla con la que se iba a acostar y, una vez elegida, con un movimiento de cabeza indicarle el camino de la habitación. ¡Ah, cómo me excitaba al pasar al cuarto con mi ocasional partenaire, escuchar a través de la pared que nos separaba de la habitación de al lado los gritos de yegua de la hembra que había sido elegida antes que yo y en ese momento estaba siendo culeada por su macho! En pocos instantes yo misma me encontraba sumada al coro de yeguas delirantes de placer, con una tremenda poronga incrustada en mi culo, moviéndose sabiamente para dar y recibir placer