La hija de Sofia
Fecha: 01/07/2018,
Categorías:
Intercambios
Autor: LaPamelaOriginal, Fuente: SexoSinTabues
... irse, ordenen los sillones y los almohadones. Y por último fui a la cocina donde encontré a mi hija, la única artífice y total culpable de todo este caos. Pero ella estaba en otra cosa, miraba como embelesada como unos chicos se besaban de forma lasciva al otro lado de la mesa de la cocina. Yo no podía dar crédito a lo que veía, eso no era besarce; estaban haciéndolo con la boca. Unos calores me subían y bajaban y eso que ya he visto de todo. Y tal cual como había dicho mi hija eran los hermanos y la verdad cualquiera que los mirase diría que son una linda pareja. No pude seguir mirando revise toda la casa en busca de polizones pero ya se habían ido todos. Llame a mi hija para reprenderla por usar mi casa sin permiso, pero en cuanto se reunió conmigo en la sala, dejando a los hermanos en la cocina. Lo primero que hizo fue pedirme si se podían quedar a dormir esta noche en mi casa. Me dejo sin palabras porque yo quería reprenderla pero ya estaba a punto de hacer lo opuesto. Me contó que ya tenían una coartada planeada, para ella que habría una pijamada en casa y el varón que se iría con sus amigos. Yo solo tendría que confirmarlo en caso de que sus padres me llamaran a tal fin. Mi hija me rogaba y pedía que yo aceptase, ella misma se imponía penas a cumplir a futuro aún mas duras que las que le iba a dar por el desorden reciente. Para ese momento los dos ya se habían vuelto a la sala y desde el umbral de la puerta esperaban un gesto de confirmación, así que ante la presión ...
... tuve que decir que si. Al fin pude subir a mi recamara a darme un baño, largo y relajante, luego me puse cómoda con mi camisón de dormir nuevo, es un poco largo pero muy fino y fresco y arriba bastante escotado de mas, pero como vivimos solas no repare en que los chicos me fuesen a ver esa noche. Baje a la cocina y mi hija había preparado unos bocadillos y unas pizzas para esperar a sus amigos que no tardarían en llegar, ya que tan solo se fueron a bañar y cambiar para salir nuevamente. No paso mucho rato en que sonara el timbre. Mi hija les fue abrir y luego tranco la puerta con todos los seguros. Los chicos pasaron a la sala donde frente al televisor habíamos dispuesto todo para cenar. Luego echamos un montón de almohadones en el piso alrededor la mesa ratona y en la tele pasaba una película casi sin audio para no interrumpir la charla. Abrí una botella de vino y serví en cuatro copas. No pude evitar ver como el chico observaba mi escote y es que no deja mucho a la imaginación. Pero como su motivación era otra, no le di importancia a eso y no repare en cubrirme en lo mas mínimo. Por otro lado mi hija también estaba ligera con un camisón bien cortito, que ni siquiera tapaba sus nalgas, si bien era mas cerrado arriba, cuando se sentaba quedaban todas sus bragas a la vista. Pero todo esto no incomodo a los hermanos al contrario; puso mas calor a sus ya encendidas ganas de besarse ya que entre trago y trago no perdían oportunidad de posar sus labios juntos. Yo quería saber como ...