Me dieron dos veces en la noche. - Relatos Eróticos

Me dieron dos veces en la noche.

Habia rumores de que yo era ninfomona y quizas ellos tenian razon como tambien podian estar equivocados. Entraba a mis veintidos años de edad y me queria comer todas las bergas del mundo. Esos años creo que fue una epoca donde me cogieron muchos sin saber de mi lo que estaba viviendo, una mujer desesperada por las bergas. Me sentia segura con mi figura y sabia que era bonita que mi famila queria verme casada para no seguir desprestigiando a toda la damilia y me case. Para mi, el de haber contraido matrimonio con un buen hombre al cual yo sabia que tarde o temprano le iba engañar, creyeron que siendo casada seria un paro a mi situacion de mujer caliente para no seguir buscando bergas. Hice el esfuerzo para no seguir buscando mas bergas por donde yo iba pasando, pero tambien sufria por mis adentros a no seguirlo haciendo porque mi cuerpo si que demanada a que le diera berga a mi panocha. Mi familia no me dejo ir a trabajar a compañias donde habian muchos hombres y mi esposo preferia a que fuera a limpiar casas de familia para matenerme alejada de los hombres. El mundo es chico cuando una dia llegue a un edificio para limpiar un apartamento cuando el encargado del edificio resulto ser un hombre que me habia pedido panocha porque sabia de mi padecer y nunca hubo tiempo para yo haber cogido con él por circunstancias de momentos. Siempre que lo decidimos hacer hubo problema. Nos miramos en el edificio y los dos estabamos sorpendidos. Sabia que me habia casado y me preguntaba ...

... "Entonces ya no le haces como antes" Mire que me llevo en el elevador de carga y en medio de los pisos del edificio detenia el elevador. Se sacaba la berga y al verle su berga me dio sed de probar berga y comence a pelear conmigo mismo para no caer en tentacion. Senti que no queria dejar atras una berga sin probar y le prometia que lo ibamos hacer, pero que me dejara ir a trabajar y que despues resolveriamos. Me pido que se la tocara y se la toque y mas comprometida me senti que él me pidio que me dejara tocar de él. Me levante el vestido y por un lado de mis bragas me metia su dedo en mi raja toda humeda y despues de chupaba el dedo. Esas locuras me ponian mas caliente de lo que ya estaba. No trabaje bien en solo pensar de lo que habia vivido con ese amigo que en tiempo pasado pude haber cogido con él. Me vi en el espejo del apartamento que limpiaba y me decia que yo no podia dejar berga atras de mi. Camine la escaleras para no ver a este amigo y el condenado estaba ahi e la puerta del edificio esperando por mi. Me dijo al oido que no lo dejara asi. Tenia que llegar a cierta hora a casa porque hasta con el tiempo estaba muy controlada y le dije que lo esperaba en el baile donde nosotros los de familia ibamos a vacilar por las noches los sabados por la noche. Me bañaba y ya pensaba en la que habiamos quedado con este amigo y me prometia que seria la ultima berga de mi vida, pero al ver mi cara en el espejo del baño mire a la otra yo que no creia lo que habia dicho y se rie muy ...