El gran juego morboso
Fecha: 25/07/2018,
Categorías:
Fantasías Eróticas
Confesiones
Autor: OscarVilla, Fuente: CuentoRelatos
... ser su puta y fuiste su puta por un tiempo que no midió ningún reloj de la vida. Pero nada acaba ahí, ese sería un final sin sentido, un final como otros muchos. Ahora deseas saber lo que aquel tipo pensó de la experiencia. Saber que sintió, que vieron sus ojos, como gozó de tu cuerpo, que sensación lo embargó cuando finalmente se hizo realidad el verte desnuda, de pie, llenado tu coño con esas bolas que te dan sumo placer y masturbándote como jamás lo habías hecho. Es otra de las partes del morboso juego, un juego que no tiene fin y cuyos límites tan solo quedan al arbitrio de la imaginación. En pocos días vivirás la primera gran experiencia. Dos tipos a los que no conoces de nada, a los que jamás has visto, te van hacer suya. Pero no será un polvo de hotel de tercera, no, eso no tendría sentido. Ni tan siquiera te gustaría. Por varias horas te vas a sentir un objeto para que disfruten de ti, de tu cuerpo, para que salgan a la luz sus deseos más ocultos, más oscuros. Desnuda, de rodillas, atada con tus manos atrás y con los ojos vendados, serás ofrecida, entregada, para servir de disfrute a dos tipos que nada saben de ti. Serán instantes inolvidables cuando te sientas tocada, horadada; cuando sus pollas llenen tu boca y su semen riegue tu cuerpo o simplemente cuando decidan tumbarte sobre la cama o en el suelo para follarte salvajemente. Se sucederán, y tú lo sabes, tremendos orgasmos que te llevaran a otra dimensión a otro estadio. Ellos harán lo que quieran, como a ti te ...
... gusta, y tú solo podrás obedecer, ser esa sumisa que llevas dentro y cuyo rol te ha proporcionado los momentos de mayor placer. Sé que has soñado con ello varias veces, has soñado despierta recreando en tu mente esta morbosa situación mientras no podías evitar que tu mano acariciase tu coño hasta correrte, llevándote a un nuevo orgasmo. Poco a poco, cada día que pasa, cada vez que se acerca la fecha elegida, notarás como los nervios se desbordan, como la adrenalina va subiendo a cada paso, como tu coño se humedece de solo pensarlo. Y así llegará el día. La primera llamada de contacto. Oirás su voz, será muy breve pero la escucharás. Luego la tensa espera, quizás una hora. Los últimos preparativos. El reloj irá corriendo tal vez más lento que otras veces, pero correrá. Comenzarás a desnudarte, a perfumarte para él. La hora se acerca. Sentirás como ato tus muñecas, como tus manos quedan inmovilizadas a tu espalda, a merced de lo que suceda. Falta ya muy poco, casi nada. Te arrodillarás. Notarás como el ritmo de tu corazón sube, como el deseo incontenible se adueña de tu cuerpo. Vendaré tus ojos, no podrás ver nada de lo que suceda a tu alrededor y aguardarás. Ya no serás tú, tu voluntad ha dejado de pertenecerte y al final, casi sin darte cuenta, escucharás los golpes en la puerta. El habrá llegado y nada tiene ya vuelta atrás. Quizás en ese instante tu grado de excitación alcance límites absolutos, tal vez el solo hecho de tocarte provoque tu primer orgasmo. Eso solo será el ...