1. Trío después de natación


    Fecha: 04/08/2018, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... verga en mi hoyo, mientra que Nicolas se gano delate mio y me así lamerle, besarle y tragarme toda la verga. Fue cuando en eso se puso un condón y empezó lentamente a meterme su verga de 20 cm. En un principio dolió, pero cuando me metió toda su verga todo se convirtió en placer, trataba de gritar, pero Nicolas no me dejaba, y fue cuando ya estaba tan metido en el place que decidieron cambiar. Nicolas hizo algo diferente. Me limpio bien en ano y me penetro sin condón. entró demasiado rápido, ya que ya estaba dilatado. Ambos gritaban, pero yo no podía gritar. me golpeaban cada vez que gemía de placer. Nicolas cada vez empezo más y más rápido, metía y sacaba, ya iba a ocurrir lo inevitable. Mientras que Samuel le tragaba toda la paja. Y fue cuando Nicolas se vino dentro mio, ocho chorros de semen, y cada uno me acerca mas al cielo. Esa fue una de las sensaciones más maravillosas que he sentido, fue un viaje al espacio. Y en eso tenía que lidiar con la verga de Samuel en mi cara, cuando también se vino en mi cada y pare de su pecho. Estos fueron seis y como ...
    ... buena puta, me trague todo el semen. Ahora estaban los dos contentos, pero yo quería estallar, mi verga estaba inflamada. Y al verme tan excitado, Nicolas me dice: -No creas que nos hemos olvidado de ti. Me acostaron en el piso, frío y húmedo y ambos se acostaron a mi lado. Me volvieron a manosear y tocar mi entrepiernas y Samuel toma mi verga y la empieza a jalar con pasión. -Ahora gime todo lo que quieras. - Me dijo Samuel. Mientras me masturbaban, me besaban . Yo los tocaba y fue cuando Nicolas decidió terminar de pajearme. Bajo y me masturbo tanto que solté litros y litros y litros de leche. Nos quedamos tirados en un piso mientras nos besábamos y con sus dedos hacían comerme todo mi semen, Cuando nos dimos el animo, fuimos los tres a la ducha y nos limpiamos mientras podía sentir el roce. Me pegaban en cada cachete. Se nos fue la noción del tiempo y la escuela iba a cerrar. Lo cierto es que cuando nos despedimos en la ducha con un beso de tres sabíamos que no era el fin de nada, sino el inicio de algo más que ninguno de los tres se había atrevido a aceptar. 
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