VACIONES DE VERANO - Relatos Eróticos

VACIONES DE VERANO

... Don Nacho, del rancho del fresno, ahí vive Bernardo y Rosario, si lo sé, son mis primos, se me quedo viendo, y ambos reímos, y después dijo, vaya pues quizás es de familia, nos despedimos y me dirigí al rancho, pero antes de llegar me quite la lencería, y me dejo solo el pantalón de mezclilla y el suéter, llegue y al aproximarme a mi cuarto una silueta familiar con voz femenina, me salió en el camino susurrándome ¿Donde andabas primo? y al acercarme a ella pude ver que se trataba de Rosario, ¿Que haces aquí, Bernardo puede despertar y vernos juntos, ella rio tenuemente diciendo, huy Bernardo casi se muere cuando llega borracho puede explotarle una bomba al lado y ni así se despierta, abrí la puerta de mi cuarto y ella entro de inmediato, yo estaba muy nervioso, Chayo nos pueden descubrir, pero ella estaba como poseída, no te preocupes todos duermen, son las 3:30 de la mañana, mi suegra se levanta a las 5 aun tenemos hora y media, y terminando de decir eso, se bajo y me desabrocho el pantalón, sacando mi pene y metiéndolo a su boca, yo por más que quería decirle que parara ella estaba totalmente entregada al momento, espera Rosario, me siento algo cansado y quizás ya no se me pare hoy, pamplinas, yo también me quede con ganas de que me cogieras hace rato en la laguna, y sin decir más, se quito la delgada bata que llevaba y se acostó en la cama, ya no pude mas, me deje ir sobre esa mujer convertida en la lujuria misma, recorrí con mi boca cada milímetro de su blanca piel, y me ...

... detenía en su entrepierna, arrancándole gemidos de placer que ahogaba en su garganta para no hacer ruido, era toda una hembra, entonces supe porque Bernardo no le tomaba mayor importancia a su esposa, quizás era porque ya había dejado de ser suficiente para ella desde hace tiempo, ella solo me pedía que por favor no parara, que siguiera besándola, y devorándome su vagina que se apreciaba muy muy mojada, entonces tomo mi cabeza y hundió sus dedos en mi cabello jalándome hacia ella, haciendo que me bebiera su primer orgasmo, sentí su miel un poco amarga y viscosa en mis labios pero no obstante eso, la bebí, después tome sus tobillos, con cada una de mis manos, y abriéndole las piernas en toda su extensión le metí la verga de un solo golpe, haciendo que exclamara un haaaa que se escucho en todo el cuarto, para que no siguiera gritando puse mi boca en la suya, y nos besamos hasta que le dije, me voy a venir prima, entonces ella me suplico, vente en mi boca, me salí, y me puse de rodillas en la cama, ella se acostó quedando su boca debajo de mi pene, lo metió casi justo cuando mi primera descarga se hizo presente, y así volví a terminar en la boca de esa hermosa mujer dos veces en un día, lo que muchos en el pueblo hubieran deseado cuando menos una vez en su vida, yo ya lo había conseguido en dos ocasiones antes de que amaneciera. La actividad del día siguiente era ir a nadar al rio, así que la mayor parte de la tarde estuve muy relajado, hasta que Bernardo se me acerco pidiéndome ...