Sexo compartido entre amigos
Fecha: 16/08/2018,
Categorías:
Gays
Sexo en Grupo
Lesbianas
Autor: aboixbcs, Fuente: xHamster
... rápidamente, con los ojos semi cerrados miré a Juan, por encima del cuerpo de Susan, respiraba con la boca abierta, echada la cabeza hacia atrás, a punto de correrse, gemía y gritaba, empujando su cuerpo sobre las nalgas de la mujer, con el miembro entrando y saliendo rápidamente del ano femenino. Ella aceleró su masturbación sobre mi verga, presintiendo que ya estaba a punto de eyacular. Apoyándome en los pies, elevé el cuerpo hacia ella, que, con el pene en la boca, succionó fuertemente cuando, con un aullido salvaje, me dejé ir.Un chorro abundante de esperma saltó disparado hasta el fondo de su garganta, ella recogió en su boca las continuas emisiones eyaculadas, chupando y tragando el blanquecino flujo seminal.Juan se quedó quieto, con la verga aun introducida en el intestino de la mujer, con el cuerpo temblando, con espasmos producidos por el orgasmo, y acompañando con gritos de placer las emisiones de leche, que parecían no tener fin.Cuando de su boca sacó la verga aun erecta y goteante, Susan la apretó entre sus dedos, en la punta del glande apareció una última gota de espeso semen, la miró y pasando la lengua, la recogió golosa con un gemido de placer.Juan, por fin sacó el miembro del interior del ano, arrastrando un reguero de esperma que el intestino expulsó al cerrar su esfínter, se volvió a poner arrodillado tras ella, y pude ver cómo, con placer, recogía con su lengua su propia eyaculación, lamiendo una y otra vez entre los glúteos, sobre el irritado ano de ...
... la mujer.A continuación, adivinando el deseo de Susan, sin dejar de lamer y besar sus nalgas, metió su mano entre las piernas, cubriendo con ella la vulva húmeda y trémula, introdujo el dedo palpando el sensible clítoris, que suavemente empezó a frotar, ella seguía arrodillada a mis pies, con la cabeza sobre mi fláccido y mojado pene, asido aun entre sus dedos, temblando el cuerpo por la convulsión propia del orgasmo cercano, gimiendo y murmurando palabras incoherentes.Pasé mis manos por debajo de su cuerpo, para masajear sus pechos, presionando entre los dedos, los endurecidos pezones. Ella besaba y lamía convulsiva mi sexo, la verga, el glande, cogiendo entre sus labios la bolsa de los testículos, mientras llegaba rápidamente al clímax.Juan aceleró su frotación del clítoris, Susan se incorporó lanzando un grito, seguido de fuertes gemidos, cuando alcanzó el clímax, con el cuerpo temblando, presa de los espasmos propios del orgasmo. Juan, con el miembro recobrando su erección, hizo que se volviera a inclinar sobre mis piernas, se colocó tras ella, dirigido con su mano, encaró la punta de la verga entre los labios de la vulva, y con un ligero empujón la penetró profundamente en la vagina. Susan, sin reponerse del orgasmo gozado, seguía gimiendo y gritando de placer, moviendo el cuerpo al compás de Juan, besaba y lamía mi sexo, chupando el flojo pene, que, con la caricia, también cobraba volumen, el hombre aceleró sus movimientos, próximo el orgasmo, gimiendo en sus embates, ...