1. HIJOS INCESTUOSOS (Mariana)


    Fecha: 17/08/2018, Categorías: Incesto Autor: Hansolcer, Fuente: SexoSinTabues

    Como conté hace algunos meses, el descubrir a mis hijis teniendo sexo entre ellos fue regresar a mi epoca de niño. Fue recordar esa epoca en donde quiza a falta de juguetes, mis hermanos y yo teniamos sexo entre nosotros. También me hizo meditar que quizas el incesto era algo hereditario, familiar. Porque de que otta manera pidria explicarse que igaul mis papás, tios, primos y demas igual hayan tenido experiencias similares. El incesto de mis hijos solo abrió la posibilidad de compartir y por eso mi propuesta es día que los encontré: SE LO QUE HICIERON, YO TAMBIEN QUIERO .... He aca lo que pasó Serian las 12:30 de la madrugada cuando entro el mensaje de whassap: DICE MARIANA QUE VENGA AL CUARTOOO. ¿Qué decir? Que se responde en estos casos. Sinceramente dudé, pero la carta estaba echada: LLEGO EN 20 MINUTOS escribí y le di enviar. Entro un nuevo mensaje: OKIS. Entro uno mas: DICE MARIANA QUE VA APAGAR LA LUZ. OK respondí. Mónica dormía profundamente quizá cansada por el viaje. Estaba recostada de frente a donde yo estaba, se veía hermosa. Su respiración me decía que despertaría hasta bien entrada la mañana. Salí a la sala dispuesto a enfrentar aquello que había propuesto a mis hijas, vestido nada mas con short y playera deportiva me encamine decidido al cuarto donde días antes había escuchado ruidos y nacieron mis sospechas sobre sus actos sexuales. Me detuve como cerciorándome que nadie pudiera verme entrar, ilógico partiendo del hecho de que era su padre. Una sensación ...
    ... extraña, un nerviosismo inusual recorría mi cuerpo. Cuando gire la manecilla creí que se había escuchado por toda la casa, tanto que entre de golpe como si atrás quisiera dejar a mis temores. El cuarto estaba oscuro, pero sabia exactamente donde estaba la cama de Mariana. -Hola amor -Dije paternalmente – intentando palpar su cuerpo. Ahí estaba, supe que no tenia nada arriba. Sus pechos erectos, el pezón durito como bolita. La sentí estremecerse a mi contacto. Quise saber si tenia ropa interior y deslice mi mano sobre su abdomen hasta llegar al elástico de su diminuta tanga. Por un segundo pensé cuanto se parecía su cuerpo al de su madre cuando estaba joven. Piel suave pero de muslos firmes, bien proporcionada. En lo que si no había duda de su herencia era en lo abultado de su parte íntima, aún por encima apenas y se cubría con una mano. Mariana mi hija respiraba excitada. Más cuando sintió como mis labios se apoderaron de sus pezones, centímetro a centímetro empecé a disfrutarlos con mi lengua. Mi traviesa mano la despojo de la única barrera que podía hacerme sentir que ese cuerpo estaba totalmente a mi disposición, le quite su tanga y la lance al piso. Me coloqué entre sus piernas y baje saboreando desde sus pechos hasta llegar al ombligo y me detuve. Luego baje por su pierna izquierda hasta llegar al pie, después hice lo propio con la derecha. Su piel eriza y sus jadeos me indicaban que lo estaba disfrutando. De nuevo regrese al ombligo y esta vez subí hasta su garganta, sus ...
«123»