El tambo
Fecha: 21/08/2018,
Categorías:
Gays
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... pequeña manita de arriba a abajo. Así pues, pese a la incómoda postura y al calor del metal en el que estábamos metidos, yo me relajé y disfrute de la rica paja que Julián me estaba dando. Recuerdo que el nene estaba como hipnotizado por mi verga, mientras me masturbaba no apartaba los ojos de ella y solo me hacía preguntas, como por que le pedía que me hiciera eso. Entre jadeos le contesté que era porqué se sentía muy rico y era la verdad su manita subía lentamente la piel de mi pene para bajar despacito descubriendo la cabeza, yo no podía mas que retorcerme del placer. Julián continuaba su trabajo sin detenerse, estoy muy seguro de que el también estaba excitado. Una gota de líquido asomó por el ojo de la cabeza, Julián se asombró y me preguntó que si me estaba orinando. Yo tenía poca cabeza para contestarle, solo quería que no parara, así que la limpié con mi mano. Alguna escusa le invente para que continúe y si bien su manita continuó subiendo y bajando la piel de mi verga, había cierto dejo de asco en su mirada, pero yo seguí disfrutando del placer que su paja me regalaba. Ahí hubiera podido quedar la cosa, ya esa simple paja era deliciosa y suficiente para hacerme acabar...pero la idea desde el principio había sido que me la mamará, así que debíamos pasar a eso. -Dale un beso Juliancito. - ¡No guacala! - si Julián se bueno y dale un besito. -Pero por ahí haces pipi, no quiero hacerlo. Teníamos la plática mientras su rica paja no se detenía ni un momento. Sé que Julián ...
... pese a todo, también lo estaba disfrutando, si no, no me explico por qué su mano no dejaba de subir y bajar por mi dura y caliente verga y les digo que no podía dejar de verla y como seguramente estaba excitado al igual que yo, de pronto dejo de resistirse y se agacho acercando la carita a mi verga y le planto un beso en la amoratada cabeza, fue rápido, un simple piquito, pero yo sentí una descarga eléctrica deliciosa que me recorrió la verga. -Dale otro beso, le ordene, Julián de nuevo dudo un poco, pero volvió a hacerlo y no solo eso, sino que después del segundo beso, ya no se separó de mi verga y varios veces sus labios chocaron contra mi glande al tiempo que me seguía pajeando. Me gusta pensar que aunque todo esto era nuevo para él, le gustaba mi verga, le gustaba sentirla en su mano y en sus labios. Dio como quince besos seguidos y la verdad me estaba llevando al orgasmo, pues su mano ya había entendido el truco y me masturbaba muy bien, mientras que sus besos eran suaves y cálidos. Le tuve que pedir que se detuviera, para así poder alargar más el placer. Descansamos un par de minutos, mientras hablábamos de no sé qué cosas. Finalmente cuando me sentía listó le dije que continuara, su mano agarro mi pene de nuevo y sin esperar más instrucciones continuo con su paja. -Bésalo de nuevo, y el putito ya no se resistió nada, volvió a besarlo, ya no necesito que le dijera nada, le daba besitos de ves en ves mientras me masturbaba, matándome del placer. -Mételo en tu boquita y ...