Nacimiento del harem (Cap. 8)
Fecha: 24/08/2018,
Categorías:
Dominación
Autor: ALTEZA, Fuente: CuentoRelatos
Mientras el Ama gozaba de su merecido masaje de pies, el resto de las perritas cumplían con sus deberes asignados, unas estaban barriendo, otras lavando ropa, otra lavaba ventanas, en fin hasta las jardineras cumplían su jornada de 16 horas de trabajo diario. Todas eran felices viviendo a los pies de su dueña, ya hasta para las hijas de las perras se habían adaptado y aceptado su manera de comportarse, ya que ahora sus cerebros de tanto estar obligados a estar solo trabajando día y noche, ya su vida anterior la estaban olvidando cada día más, ya hasta sus nombres de pila habían olvidado y ahora solo respondían al de ser una perrita sumisa, estaban fijamente en el deber servir bien a su reina, y su vida anterior era ya un recuerdo olvidado. Ya su voluntad para resistirse a su nueva vida era prácticamente nula, ahora eran unos zombis que trabajaban sin descanso, ya hasta su vocabulario se había reducido a usar unas cuantas frases solo para atender y servir a su Ama. Esas frases eran “si Ama, a sus pies Ama, sus deseos son ordenes, o estamos para servirle”, y sus madres de esas ya ni que decir, esas eran unas completas arrastradas, que solo decirles a brincar, ellas respondían ¿qué tan alto desea que brinquemos?, su voluntad ya solo les permitía ser perritas a los pies de Su Majestad” A la dueña de tan impresionantemente obediente y sometido harem, se le ocurrió que no solo podría someterlas a su antojo, sino que se le estaba ocurriendo hacer que sus perras produjeran dinero en ...
... cantidades bastante grandes, y todo ese dinero se iría directo a las arcas de Su Majestad. Llamó a sus esclavas haciéndose escuchar dos palmadas sonoras, las esclavas se presentaron al instante postrándose a los pies de su Ama en postura de adoración, se le ordeno que entre su familia y amigas debían reunir unas 30 sumisas más, ya que tenía planes de uso para las nuevas. Las perritas al estar ya domesticadas no opusieron ninguna resistencia. Las perras madre se encargaron de conseguir a sus familiares y las perritas hijas se dieron a la tarea de conseguir compañeras de escuela, mientras tanto las perritas domesticas se dedicaron a continuar sus obligaciones. Pasaron dos días y ya las esclavas tenían a algunas familiares, les dijeron que les iban a ofrecer un buen trabajo donde se gana mucho dinero; situación en la que sus ingenuas familias cayeron en el engaño, motivo que al Ama le gustó, así al llegar sería fácil que sus propias perritas las sometieran para entregárselas a su dueña. En el caso de las perras escolares se les ocurrió decir a sus compañeras que se les iba a ofrecer una beca para poder continuar sin tener que pagar absolutamente nada; solo deberían presentarse en la dirección que ellas les dijeran. Esa misma tarde tocaron a la puerta y la esclava que fungía de Ama de llaves se apresuró a abrir la puerta para conducirlas ante su majestad en el salón principal. Al ingresar a la casa las ingenuas estudiantes y ver tanto lujo se tragaron muy fácilmente la píldora de ...