BAUTIZO DE CORNEADOR - Relatos Eróticos

BAUTIZO DE CORNEADOR

... ido a casa con la impresión de haber pasado un gran día. Me dijeron que tenían la comida casí hecha que solo al llegar era unos 20 minutos mas y comeriamos, cuando le dije a los dos que deseaba invitarlos a comer fuera que dejaran la comida para ellos para el dia siguiente insistí, me gustaba estar como estabamos ahora fuera charlando, estuvimos hasta la hora de comer y de ahí me llevaron a un buen bar de comidas, nada de restaurante, ese era mucho mejor y mas barato, asi fue comimos como reyes y tras ello unos cafes prolongamos con una copa allí en el mismo bar, hasta que sobre las 5 decidmos marcharnos, para un hombre como yo, que habia estado en tantos cambalaches de distintos tipo ese era el momento crucial y lo sabía que dirían en ese momento y yo sabía que lo debía decir ella, cuando el camarero se marcho con la cuenta y el dinero y esperamos la "vuelta", ella dijo ahora vamos a casa y tomamos un cafe con unas pastas que tengo allí, esa era la señal lo que yo esperaba a esas alturas, o despedirnos educadamente, o esa invitación, que era lo mas probable, por como habia llegado yo hasta allí. En un barrio periferico, todo de urbanizaciones con casas adosadas de dos plantas, ahí vivían aparqué mi coche ellos el suyo, entramos en la casa, la planta baja, es un gran salón la cocina, un baño, un pequeño despacho, llegamos al salón los tres, Carmelo lo hizo a proposito, se quitó el pantalón diciendo que se iba a cambiar, ante mi apareció en bragas, había llevado bragas en ...

... todo momento, así se quedó y subió a la primera planta, en bragas nada más su esposa cogió la ropa y la colgó en la entrada de ahí se dirigió a la cocina diciendome voy a preparar el café, quedé ahora solo en el salón escuchando el ruido que ella producía en la cocina, camine hacia la cocina ella estaba preparando la cafetera, de espaldas a mi, me armé de valor, y pasé mis dos brazos por su cintura ella sabía que yo estaba atras, no se asustó, vovilo la cara le di un besó en su mejilla carnosa, sentí el olor de su suave prefume, ella me dijo esperaté vamos a tomar el café tras decirm eso me dio un beso en los labios, la solté, termino de conectar la cefetera se volvio volvi a pegarme a ella y nos besamos, mis manos prontto pasaron de su espalda a sus nalgas, las aprete con mis manos mi polla dura yo me pegaba mas para que la sintiera, se separó de mi suspirando, espera, por que me estas poniendo mucho, él cafe seguía bajando a la cafetera, ella se volvió a mirarlo, le dije entonces donde estaba las pastas para colcarlas, ella me indico donde y donde una bandeja las fuí colcando, sin dejar de mirarla cuando se colocaba de espaldas a mi, habia tocado aquel culo carnoso y grande, habia sentido sus tetas aplastarse en mi pecho, colocamos las pastas en el salón el cafe las tazas, bajó Carmelo, "Carmela", iba vestida de manera insinuante, pidiendo "guerra", de abajo arriba, unos zapatos de tacón fino negro medias negras transparentes pelo suelto mojado, vestido tallado al cuerpo casi ...